El próximo domingo tendrá lugar la votación por parte de la Asamblea Federal para elegir al nuevo presidente en Alemania, al tiempo que el candidato Joachim Gauck, de origen germanoriental, se perfila como favorito para ocupar el puesto.
En caso de que el político de 72 años reciba los votos de todos los partidos que lo apoyan, entonces contaría con por lo menos un 88.7 por ciento de las papeletas para ser electo presidente de Alemania.
Cuatro de las cinco fracciones parlamentarias brindan su apoyo a Gauck, quien participó de forma activa en el movimiento ciudadano de la ex República Democrática Alemana (RDA) que promovió la revolución pacífica previa a la caída del Muro de Berlín.
Gauck, quien no pertenece a ningún partido, es el candidato de las fuerzas políticas que conforman la coalición de gobierno, Unión Demócrata Cristiana (CDU) y Partido Liberal (FDP), así como de los opositores socialdemócratas y Verdes.
El candidato, quien nació en Rostock en 1940, se ha desempeñado como autor, político, además de haber sido pastor en la iglesia luterana y funcionario eclesiástico en la ex RDA.
Gauck se convirtió en una figura central tras la Unificación alemana el 3 de octubre de 1990, al ser nombrado director de la Oficina encargada de la investigación de las Actas del Servicio Secreto (Stasi) de la RDA, puesto que ocupó durante 10 años.
El ahora candidato para la presidencia ha participado de forma continua en el diálogo social político en Alemania, y ha sido premiado en varias ocasiones por sus publicaciones.
La décimo quinta Asamblea Federal, que citó el presidente del parlamento alemán, Norbert Lammert, para reunirse el próximo 18 de marzo cuenta con mil 240 votantes, de los que 620 son diputados y otros 620 son personas nombradas por parte de parlamentos regionales.
Los parlamentos regionales pueden nombrar tanto a políticos municipales como a personalidades de diversos ámbitos, como en el caso de la CDU en Berlín que nombró a Otto Rehagel, el entrenador de su equipo local de futbol, Hertha BSC.
El partido La Izquierda presentará a su propia candidata para la presidencia: Beate Klarsfeld, a quien se le conoce como “cazadora de criminales de guerra nazis”.
Klarsfeld se hizo famosa cuando en 1968 dio una bofetada al entonces canciller federal, Kurt Georg Kiesinger, dado su pasado nazi.
El extremista de derecha Partido Nacionalista de Alemania (NPD) presentará asimismo por su parte como candidato a Olaf Rose, un miembro de su fracción parlamentaria en Sajonia.
Se prevé que Gauck obtendrá en la primera vuelta la mayoría absoluta, por lo que no se esperan grandes sorpresas durante la votación, al contrario de lo que sucedió durante la última Asamblea Federal en junio 2010.
Christian Wulff, el candidato que propuso la CDU tras la renuncia repentina de Horst Köhler, obtuvo una estrecha mayoría sólo hasta la tercera vuelta, dada la reñida votación entre éste y el entonces candidato de la oposición, Gauck.
La votación del presidente alemán el 18 de marzo tiene lugar tras la renuncia el pasado 17 de febrero por parte de Wulff, quien fungió en ese puesto apenas un año y siete meses, si bien se trata de un mandato de cinco años.
El político conservador, ex gobernador de Baja Sajonia, se vio inmiscuido en un escándalo de créditos privados y camarilla, por lo que tras fuertes críticas en la prensa y en ciertos círculos políticos se vio obligado a abandonar su cargo.
El sucesor de Wulff tomará juramento el próximo 23 de marzo en el marco de una reunión conjunta del Bundestag (parlamento alemán) y de la Cámara de Representantes, y dicha ceremonia se efectuará en el Reichstag (sede parlamentaria) en Berlín.
El futuro presidente de Alemania se dirigirá al término de esa ceremonia a la sede de la Presidencia en el Palacio Bellevue, ubicado en las cercanías del Reichstag, donde será recibido con honores militares.