Las fuerza leales al presidente sirio Bashar al Assad intensificaron hoy la represión contra opositores en la ciudad de Homs, mientras el enviado de las Naciones Unidas (ONU), Kofi Annan, concluyó su visita a Rusia, como parte de su misión de paz.

Al menos 75 personas murieron en las últimas 24 horas como consecuencia de los intensos bombardeos que las tropas sirias lanzaron contra varios barrios del centro de Homs entre el domingo y este lunes, denunciaron activistas sirios a través de redes sociales.

Diversas fotografías y videos divulgados por internet muestran imponentes llamas y densas capas de humo negro sobre al menos dos zonas de la ciudad que se ha convertido en el epicentro de la violencia iniciada hace más de un año.

"Los bombardeos han encendido la ciudad. El régimen está eliminando todo en Homs", destacó Waleed Faris, un activista residente en Homs, quien acusó al ejército de bombardear de manera indiscriminada a la población de la ciudad, según un reporte de la cadena Al Arabiya.

De acuerdo con el testimonio, las tropas sirias utilizaron durante sus bombardeos tanques y morteros, con los que se abren paso por la ciudad. “Esto es lo peor que se ha visto... Hay decenas de muertos y cientos de heridos", destacó Faris.

Las fuerzas sirias también atacaron la provincia meridional de Deraa, cuna de la revuelta contra el presidente al Assad, donde miles de soldados y más de un centenar de vehículos militares intentan entrar en el área de Lahat para enfrentar a opositores.

Rami Abdul Rahman, jefe del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), informó que cinco personas murieron y decenas más resultaron heridas por los enfrentamientos en Deraa, mientras que la agencia estatal Sana reportó la muerte de seis “terroristas”.

La organización Human Rights Watch (HRW) denunció que las tropas sirias han ingresado a las zonas de combate utilizando escudos humanos. “Hombres, mujeres y niños son obligados a caminar en el frente de las tropas y sus autobuses”, aseveró.

La nueva jornada de violencia, la más grave desde el pasado 4 de febrero, cuando más de 260 personas murieron y unas 550 resultaron heridas, se da mientras el enviado de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Kofi Annan, busca el respaldo para impulsar su plan de paz.

El ex secretario general de la ONU concluyó este lunes una visita a Rusia y se alistaba para viajar a China, como parte de su misión para impulsar una propuesta de paz de seis puntos para Siria, que contempla el fin de toda acto de violencia.

Como parte de un esfuerzo por convencer a todas las grandes potencias para presionar a al Assad para aceptar los términos de su plan de paz, Annan se reunió este lunes con varios líderes rusos, de quienes obtuvo garantías para aceptar su iniciativa.

El gobierno de Rusia, que al igual que China han vetado las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU contra Siria y han expresado su respaldo a al Assad, consideró que la misión de Annan es la única oportunidad para evitar una guerra civil en Siria.

El enviado expresó su satisfacción por el respaldo ofrecido la víspera por el presidente ruso Dmitri Medvedev a su iniciativa y confió en que mañana martes obtenga la mismo de China, cuando se reuna con las autoridades, según el portavoz de Annan, Ahmad Fawzi.

“Annan está muy agradecido por el apoyo firme de Rusia por sus esfuerzos de mediación para llegar a una solución rápida y pacífica a este conflicto sangriento”, destacó Fawzi.