Miles de personas se unirán este fin de semana a las tradicionales “Osternmarchen”, las marchas de Pascua que cada año adquieren un significado de protesta, y que en esta ocasión se pronuncian en contra de la guerra y a favor del desarme.
La primera de las marchas, que tuvo lugar este jueves en Erfurt, se llevó a cabo bajo el lema “Para un mundo sin guerra, sin militares ni violencia”.
Durante el evento hablaron Wolfgang Musigmann, representante de la Iglesia Evangélica, y Karin Landherr del partido Die Linke (La Izquierda).
En el manifiesto de la protesta se subrayó la preocupación de que la crisis, las medidas de ahorro y las privatizaciones de los bienes públicos en toda Europa puedan ser causas de violencia.
Para este viernes están previstas marchas pacifistas en favor del desarme mundial y contra la utilización de la energía atómica, y también tendrán lugar conmemoraciones de víctimas de la Segunda Guerra Mundial en varias ciudades de todo el país.
En la ciudad oriental de Chemnitz, la manifestación se llevó a cabo este viernes bajo el lema de “No a la guerra, si a la solución pacífica de los conflictos”, un evento en el que se emitieron críticas contra la extrema derecha, debido a su significativa presencia en esta localidad.
En Dortmund se recordarán esta tarde a los opositores políticos asesinados en abril de 1945, con la presencia de familiares y autoridades locales y con el acompañamiento musical de un coro de niños.
Las manifestaciones seguirán mañana en Francfort, Berlín, Múnich, Augsburg y Bremen: habrá más de 70 eventos a lo largo de todo el país, para criticar en particular el contingente militar alemán en Afganistán.
En Berlín, la manifestación se dio cita este viernes en la plaza Potsdamerplatz bajo el título “La guerra no puede ser un instrumento de la política”, y terminará en la Puerta de Brandeburgo.
“Sí a la solución civil de los conflictos. No a la guerra, no las armas atómicas y no a la militarización interna”. “No a la OTAN” es también el tema de la manifestación de mañana en Düsseldorf.
En Hannover se protestará contra “guerra, crisis y desigualdad” en una amplia manifestación de cinco horas que pide “un mundo más digno para las personas” que lo habitan.
Manifestaciones pacifistas ocuparán también las plazas de Múnich, Oldenburg y de algunos sitios que ven la presencia de militares estadunidenses como en la localidad de Ramstein.
Las marchas de Pascua tienen sus raíces en las protestas pacíficas contra las armas atómicas en los años de la Guerra Fría, en especial en los años 1960. En los ochenta llegaron a su máxima popularidad y peso político.