Los yihadistas han asesinado al rehén francés capturado en Argelia la semana pasada. El grupo yihadista argelino Jund Al-Khilafa ha decapitado a su rehén francés, Herve Gourdel, de 55 años, residente de Niza, fue capturado el pasado domingo en la región de Cabilia, en el noreste de Argelia. Los terroristas amenazaron con asesinarlo si Francia no paraba los bombardeos de Irak. 

El presidente Hollande ha reiterado que la acción de los terroristas no lograrán su objetivo de modificar la política del Elíseo. El presidente ha confirmado la autenticidad del vídeo publicado por los Soldados del Califato: “Nuestro compatriota Hervé Gourdel ha sido asesinado por un grupo terrorista de forma cobarde, cruel, vergonzosa”, ha lamentado Hollande en una comparecencia en las oficinas de la ONU en Nueva York.

“Ha sido víctima de un crimen odioso por el que los autores deberían ser castigados”, ha advertido en declaraciones citadas por el diario Le Monde.

El mandatario galo ha dicho que Gourdel “ha muerto porque su país combate el terrorismo”, por formar parte de un pueblo “apasionado de la libertad y defensor de la dignidad humana contra la barbarie”. Sin embargo, ha añadido Hollande, Francia seguirá su lucha contra el terrorismo y, en particular, contra el Estado Islámico.

“Mi determinación es total”, ha subrayado Hollande, que el jueves reunirá al Consejo de Defensa para analizar la ofensiva contra el yihadismo y «reforzar» la protección a los ciudadanos franceses.

“Francia no cede al terrorismo. Francia no cederá jamás al terrorismo porque es su deber y su honor”.

El canciller francés, Laurent Fabius, aseguró que Francia estaba dispuesta a hacer todo lo posible para liberar el rehén. 

Los milicianos vinculados al Estado Islámico amenazan con asesinar ciudadanos occidentales, entre ellos a los estadounidenses y "especialmente, a los maliciosos y asquerosos franceses" a raíz de que las fuerzas francesas se hubieran unido a Estados Unidos en los bombardeos al Estado Islámico en Irak.

Soldados del califato

Soldados del Califato surgió como escisión de Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) y este mismo mes declaró su lealtad a Estado Islámico. La milicia está encabezada por Gouri Abdelmalek, conocido como Jaled Abu Suleimane. Abdelmalek era el jefe de AQMI en la región central de Argelia y a él también se sumaba en la escisión el líder de la organización en la zona oriental.

El primer ministro galo, Manuel Valls, aseguró este martes que Francia no negociaría con los secuestradores y que no se dejaría chantajear por sus exigencias. Esta misma tarde, ante la Asamblea Nacional, ha vuelto a defender los bombardeos franceses en Irak "porque nuestra seguridad nacional está en juego como no lo había estado nunca en el curso de los últimos años".

Por su parte, las autoridades argelinas habían movilizado a unos 1.500 soldados en la región montañosa de Tizi Ouzou donde se produjo el secuestro, si bien responsables de Inteligencia habían reconocido que las opciones de encontrar con vida al rehén eran escasas.