El portavoz de la campaña demócrata, John Podesta, anunció que Hillary Clinton no haría alguna declaración la madrugada del miércoles. Una decisión que rompió con la tradición estadounidense, según la cual el candidato que pierde las elecciones reconoce públicamente al concluir el recuento de votos su derrota y la victoria de su contrincante.
La decisión de la aspirante republicana de guardar, por ahora, silencio está suscitando ya numerosas críticas y que algunos analistas de hecho consideren como una falta de respeto hacia la democracia y los millones de estadounidenses que han votado por Trump.
Trump convoca a sanar las heridas
En su primer discurso tras haber ganado la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump convocó a los norteamericanos a “cerrar las heridas” que haya dejado la elección, asegurando que gobernará para todos.
Reconoció, a su vez, el trabajo efectuado por su contrincante Hillary Clinton, subrayando el servicio prestado a la nación.
Cabe mencionar que la también exprimera dama ya se había comunicado con Donald Trump para felicitarlo.
