Dos ataques con bomba y un tiroteo sacudieron Estambul en la noche del sábado, dejando 13 muertos y una veintena de heridos.

El ministro del Interior de Turquía, Süleyman Soylu, dijo que cerca de 20 personas resultaron heridas después de dos explosiones cerca de Vodafone Arena, un importante estadio de fútbol en Estambul. Más tarde, una fuente de seguridad confirmó a Reuters que 13 personas murieron.

"Según nuestras estimaciones hubo dos explosiones", la primera "muy cerca" del estadio del equipo de fútbol de Besiktas y la segunda, "que parece que fue obra de un kamikaze", en el parque vecino de Maçka, precisó Soylu, en declaraciones a la prensa.

Según el ministro, el objetivo del ataque era un camión antidisturbios de las fuerzas especiales de la policía, que estalló cerca del Vodafone Arena, poco más de una hora antes se había disputado un partido del Besiktas contra el Bursaspor.

La policía desplegó un operativo y acordonó fuera de la zona del recién construido estadio del club Besiktas.

Además, varios reportaron haber escuchado disparos, en lo que ya fue definido como un ataque contra las fuerzas de seguridad.

El estadio de Besiktas se halla a apenas 500 metros de la céntrica plaza de Taksim de Estambul, donde se ubican numerosos hoteles, también en estado de máxima alerta.

Por el momento, se desconoce quién está detrás del ataque, aunque algunos apuntaron contra grupos kurdos.