Luego de una ardua y extensa discusión, este jueves el Parlamento de Portugal aprobó los cinco proyectos de ley para la despenalización de la eutanasia (muerte asistida), las cuales pasarán a manos del presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, para determinar si se valida la ley o se mantiene en la misma postura.

Los cinco puntos aprobados exponen que la muerte asistida debe requerir ciertas circunstancias para su solicitud y aplicación; ser portugués (ciudadano o residente mayor a 10 años), mayor de edad, estar en pleno uso de sus facultades mentales y que sean personas cuyo padecimiento sea una enfermedad o lesión incurable e insufrible.

Las propuestas hechas por el titular del Partido Socialista, Bloco de Esquerda, logró convencer a los legisladores del Parlamento tras un primer intento fallido a mediados de 2018.

La sesión que duró más de cuatro horas, terminó con los cinco puntos anteriormente mencionados tras un largo análisis por parte de todos los legisladores.

La legalización de la muerte asistida en Portugal lleva más de diez años en debate, pero fue hasta 2018 que se discutió por primera vez.

A pesar de que estos proyectos de ley fueron puestos al análisis de las comisiones para que estudien minuciosamente algunas posibles modificaciones.

En esta última fase, el Presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, tendrá la última palabra para legislar estos proyectos.

De acuerdo con medios locales, la votación hecha este jueves, se consideró como una de las más esperadas de la legislatura que inició actividades en octubre de 2019.

Un estudio del Instituto de Ciencias Sociales del Instituto Universitario de Lisboa, detalló que el 43% de la población está a favor de la legalización de la eutanasia, mientras que el 28 % se opone (principalmente grupos religiosos); el otro 22% no tiene una opinión consolidada al respecto.