El papa emérito Benedicto XVI, de 93 años, estaría padeciendo una enfermedad infecciosa en el rostro, y se encuentra “extremadamente frágil”, informó el diario alemán Passauer Neue Presse.

Benedicto XVI sufriría de erisipela en la cara, dicha enfermedad infecciosa se caracteriza por hinchazón y placas rojizas, lo que provoca mucho dolor y picor.

El medio alemán escribió: “El papa emérito se encuentra ahora extremadamente frágil (…) su capacidad intelectual y la memoria no se han visto afectadas, pero su voz apenas es audible”.

Cabe destacar que Benedicto XVI fue el primer papa en renunciar al cargo en casi 600 años, alegando motivos de salud, desde entonces ha llevado una vida monacal en un monasterio del Vaticano.