Este fin de semana se dio a conocer que Lee Kun-Hee, presidente de grupo Samsung, perdió la vida a los 78 años tras varios años de permanecer en un hospital en Seúl, Corea del Sur.

De acuerdo con EFE, el hombre más rico del país dejó este mundo luego de estar acompañado sus familiares. 

Samsung dio a conocer en un comunicado que su hijo, Lee Jae-Yong será el heredero del imperio que dirigía su padre, pues desde 2014 está al mando de la compañía luego de que su progenitor quedara postrado en una cama.

Lee Kun-Hee, tercer hijo del fundador de Samsung, Lee Byung-chul, contaba con la mayor fortuna del país asiático al tener un neto calculado en más de 20 mil millones de dólares, según Forbes, y fue el hombre que convirtió al conglomerado en un ente multinacional con el gigante tecnológico Samsung Electronics al frente.

Lee Kun-Hee asumió la presidencia del grupo en 1987 tras la muerte de su padre.

A partir de 1993, el empresario surcoreano decidió dar un cambio de rumbo al negocio para hacer a nivel internacional  y convirtió a Samsung Electronics en el mayor productor de chips de memoria del mundo y en una de las marcas de electrónica de consumo más reconocidas.

De acuerdo con DW, por sí solo Samsung Electronics genera a día de hoy cerca del 20 % del producto interior bruto (PIB) de Corea del Sur.

Tras sufrir el infarto en mayo de 2014 fue ingresado de urgencia en el prestigioso Centro Médico Samsung, en el Sur de Seúl, donde permaneció ya hasta su muerte en medio de continuas conjeturas sobre su estado de salud.