La máxima autoridad de la iglesia católica, el papa Francisco condenó la mutilación genital de niñas y el tráfico de mujeres. En declaraciones en la Plaza de San Pedro, en El Vaticano, señaló que hoy se conmemora el día de la lucha mundial contra la mutilación genital.
Dijo que cada año unas 3 millones de niñas son sometidas a esa práctica "con frecuencia en condiciones muy peligrosas para la salud".
“Esta práctica, desafortunadamente común en muchas regiones del mundo, humilla la dignidad de las mujeres y ataca gravemente su integridad física", expresó el papa.
El pontífice añadió que el martes será un día de oración y reflexión para ayudar en la lucha contra el tráfico humano. "Ésta es una herida profunda, infligida por las vergonzosas ansias de intereses económicos, sin respeto a la persona humana", expresó.
"Hay tantas niñas que no son libres, que son esclavas de los traficantes que las mandan a trabajar y si no les entregan su dinero, los traficantes las golpean", dijo Francisco.
"Eso es algo que pasa en nuestras ciudades. Ante estas plagas sobre la humanidad, expreso mi tristeza llamo a todos los responsables a actuar decididamente para impedir tanto la explotación como las prácticas humillantes que afligen en particular a mujeres y niñas", concluyó el papa.