Después de que la cadena estadunidense McDonald's abandonara Rusia por el conflicto en Ucrania y los locales se quedaran vacíos, reabrieron sus puertas, pero ahora como una marca local con el lema "el nombre cambia, pero el amor queda". 

Los antiguos restaurantes del grupo McDonald's, que anunció su salida del país tras más de 30 años de presencia, fueron rebautizados como "Vkousno i tochka" ("Delicioso. Punto").

El característico logo amarillo fue reemplazado por dos rayas estilizadas naranjas que representan dos papas fritas acompañadas de un punto rojo.

"Intentamos hacer todo lo posible para que nuestros clientes no noten ninguna diferencia, ni en el ambiente ni en el gusto ni en la calidad", afirmó el director general del grupo, Oleg Paroyev.

El nuevo propietario de la cadena de restaurantes, Alexander Govor, prometió que el gusto no cambiará y que intentará que sea mejor.

"Esperamos que el número de clientes no disminuya, sino que aumente. Sobre todo, que ahora es una empresa totalmente rusa", dijo.

Govor, de 62 años, operaba desde 2015 bajo la franquicia McDonald's 25 restaurantes en varias ciudades de Siberia, hasta que llegó a un acuerdo de compra del negocio el 19 de mayo pasado, tres días después de que McDonald's informara de su salida del mercado ruso.

McDonald's estaba implantado desde hace 30 años en el país y fue una de las primeras ventanas que tuvo el país, que todavía era la Unión Soviética, hacia el mundo de Occidente. Por eso era una enseña muy popular y representaba cerca del nueve por ciento del volumen de negocio del grupo estadunidense.