Un juez federal ha desestimado una petición presentada por el gobernador de California, Gavin Newsom, para detener el despliegue de tropas ordenado por el expresidente Donald Trump en Los Ángeles, tras las recientes protestas contra las redadas migratorias.

El fallo fue emitido por el juez Charles Breyer, quien rechazó la solicitud de una orden de emergencia que buscaba detener el envío de militares—tanto de la Guardia Nacional como de marines—que habían sido movilizados en respuesta a los disturbios civiles ocurridos desde el 6 de junio de 2025.

El gobernador Newsom, quien había calificado la acción de Trump como una “grave violación de la soberanía estatal”, presentó la demanda tras denunciar que el despliegue militar intensificaba las tensiones en lugar de restablecer el orden. Sin embargo, la autoridad judicial determinó que no existían fundamentos suficientes para conceder la suspensión solicitada.

El panorama se enmarca en medio de protestas masivas en Los Ángeles, originadas por las operaciones de la Oficina de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) en la ciudad santuario. Las manifestaciones llevaron al presidente Trump a federalizar la Guardia Nacional —la primera acción de este tipo sin la aprobación estatal desde 1965— y poner a tropas activas en alerta, lo que provocó un aumento en los enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas federales.

En paralelo, el gobernador Newsom y la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, advirtieron que el despliegue militar podría escalar los conflictos.

Newsom, sin éxito, solicitó formalmente al secretario de Defensa, Pete Hegseth, la retirada de las tropas, señalando que su presencia aumentaba la confrontación.

El juez Breyer concedió a las partes un plazo adicional antes de emitir un fallo definitivo sobre el caso, lo que prolonga el debate legal sobre los límites del poder presidencial en el uso de fuerzas militares dentro del territorio estadounidense .