Un fragmento del Coliseo se desprendió sin causar daños, confirmó la directora del monumento, Rosella Rea, que ordenó la apertura de una investigación.
La directiva comentó que también una valla de protección ubicada en la terraza se “aflojó”, aparentemente porque un turista se apoyó en ella, lo que encendió la alarma sobre las condiciones del Coliseo, cuya restauración deberá iniciar en los próximos meses.
“La concomitancia de estos dos episodios en una jornada de fiesta no me convence”, dijo Rea al recordar una falsa alarma por bomba en agosto pasado.
Detalló que el pedazo de uno de los muros externos del monumento cayó al exterior desde una altura de unos 10 metros, sin causar heridas a nadie.
Los hechos sucedieron cuando el también llamado Anfiteatro Flavio estaba lleno de turistas, algunos de lo cuales dieron la alarma sobre lo sucedido.
Los bomberos y agentes de seguridad aislaron la zona afectada, confirmó Rea.
Poco después una de las vallas de contención de la terraza del tercer nivel estuvo a punto de desprenderse, luego que un turista se apoyó en ella.
La zona fue también cerrada al público y según Rea será reabierta en los próximos días, una vez que el desperfecto sea reparado.
El pasado 11 de noviembre el entonces subsecretario de Bienes Culturales, Francesco Giro informó que el Coliseo tiene “tres mil lesiones”, en su mayoría pequeñas fisuras que no causan alarma.
Agregó que se prevé esas fisuras sean reparadas cuando inicien los trabajos de restauración general del monumento, de dos mil años de antigüedad.