El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) consideró necesario continuar con las reformas estructurales pendientes, ya que aún con el dinamismo de la economía interna son evidentes los obstáculos para un mayor crecimiento.

El organismo expuso que a pesar de la reducción en las estimaciones de crecimiento del Banco de México para este año en el país, especialistas del sector privado confían en que el mercado interno compense la reducción en las exportaciones, e incluso se convierta en la principal fuente de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), por lo cual se debe continuar con las reformas estructurales.

En su análisis económico semanal, el organismo recordó que la modificación a la baja en la perspectiva de crecimiento del país se debe sobre todo a la debilidad de la economía estadounidense que podría desacelerar el ritmo de las exportaciones mexicanas.

Sin embargo, “aunque no hay duda de que el dinamismo exportador reporta una moderación importante en los últimos meses, se percibe de los especialistas del sector privado la confianza de que el mercado interno puede compensar tal situación y consolidarse como la principal fuente de crecimiento del país”.

De ahí que en octubre incrementaron su estimación a 3.56 frente al 3.53 por ciento de septiembre.

Detalló que el aumento en el empleo formal, el crecimiento del consumo y el hecho de que la economía mexicana haya acumulado 10 trimestres consecutivos con una tasa de crecimiento promedio anual, “refleja el potencial que tiene la actividad económica del país”.

Sin embargo, destacó que este dinamismo podría ser preocupante si alienta la percepción de que no hay necesidad de apresurar las reformas pendientes para crecer, sobre todo cuando este promedio de avance se compara con el 3.0 por ciento que se observó en 26 trimestres seguidos antes de la crisis económica.

Si bien es cierto que existen condiciones favorables para seguir creciendo, igualmente, es evidente la permanencia de obstáculos que inhiben un mayor dinamismo y bienestar de la población.

Entre ellos resalta un sistema regulatorio poco eficiente que es una fuente importante de corrupción; la falta de certeza jurídica sobre derechos de propiedad continúa siendo uno de los principales factores que limitan una mayor inversión productiva del país; aún no hay mejoría en la distribución del Congreso.

En el estudio precisó que la estructura del Impuesto al Valor Agregado (IVA), los subsidios a la gasolina y alimentos, así como los beneficios fiscales de algunos sectores, son un ejemplo de las políticas regresivas que permanecen en la economía.

En este sentido, el CEESP señaló que el país requiere de un entorno en el que todos los agentes económicos coincidan en que las políticas económicas que se instrumenten son las más efectivas para lograr una mayor eficiencia en sus funciones.

De otra forma, añadió, no habrá posibilidad de mejorar la percepción sobre la situación competitiva del país.