De hecho, tras consumirse varios miles de litros de gas expuestos al aire, no ocasionó un incremento en los niveles contaminantes que hay en la zona nororiente de la capital, por donde se ubica esta gasera y que colinda con varias colonias.

Al respecto, el secretario del Medio Ambiente y Servicios Públicos, Alejandro Fabre Bandini descartó  que se generan daños en la calidad del aire en la capital poblana ante la explosión de 17 pipas de 5 mil y 10 mil  litros de gas, así como 400 cilindros de 20 kilos de gas LP de la empresa Tomza registrada la tarde del martes en el municipio de Amozoc de Mota.

En entrevista, el funcionario municipal aseguró que este tipo de explosiones tiene un nivel de carbonización demasiado alto, y aunque genera emisiones, pero esta misma combustión, son de un combustible que dosificado que no genera mayores problemas a la salud de los habitantes.

Fabre Bandini aseveró que el tipo de material que explotó no tiene nada de peligroso en su composición, pues es lo que se quema normalmente en la ciudad pero más lentamente.

Puso como ejemplo el caso de la explosión de PRIMEX en 1981 cuyo material que detonó ocasionó lluvia de acidez que generaron afectaciones a los vehículos de la Volkswagen.

Este caso no tiene nada parecido a lo que se registró en la capital poblana la tarde del martes en la zona de Chachapa, donde se localiza la planta gasera Tamza que dejó como saldo la muerte de 6 personas.

“Lo que se consumió en la gasera es gas natural, que generó CO2 y agua, los poblanos pueden estar tranquilos de que no tendrán ninguna afectación, ni mucho menos en la calidad del aire en la Angelópolis”, acotó.

El secretario de Medio Ambiente de la capital argumentó que en estos momentos aún se brinda apoyo al municipio de Amozoc de Mota ante la cercanía que existe con la capital poblana.