Felipa Rojas Torres, directora del Centro Especializado en Atención a Víctimas de la Violencia Intrafamiliar (CEAVIF), dio a conocer que al mes son atendidos entre 30 y 40 casos de violencia en el noviazgo; el principal motivo por el cual se presenta esta problemática es la repetición de patrones, es decir, que en casa existen esas conductas.

En promedio del total de parejas que llegan al CEAVIF, 20 por ciento son adolescentes o jóvenes estudiantes, entre 30 y 40 casos que son registrados ante el CEAVIF al mes. Ante este contexto, Rojas Torres consideró que no es normal, sino alarmante, aunque por otro lado dijo “es un gran avance porque quieren ser apoyados, nos compensa saber que están dispuestos a tomar estos talleres; aunque se debe reconocer que el problema no disminuye, sino que sigue latente”, admitió.

Las edades de estas parejas que tienen el problema van de los 13 a los 16 años, es decir, son jóvenes que están en el nivel medio básico. Estos casos llegan a detectarse gracias a que en ocasiones algunas escuelas canalizan a la pareja o a las familias completas para tratar el tema de raíz.

Señaló que el principal factor por el cual las jóvenes y adolescentes tienen la mentalidad de que ser violentadas es normal, es porque hay un patrón repetitivo, ya que estas actitudes se ven en casa. Aunado a eso, en la idiosincrasia de las mujeres en México el motivante son los celos. “No me gusta que platique, que salude a otro; no quiero que hable con nadie, si no sale conmigo mejor que no salga con nadie”, son los argumentos de los jóvenes.

“Este tipo de conducta no es normal, no es normal que las violenten, que las cuestionen o vigilen; sin embargo, los excusan con el argumento de ‘sí, se pone violento, pero con eso demuestra que me quiere’. Es en esto en lo que nosotros debemos trabajar para cambiar su actitud”, dijo.

La violencia intrafamiliar

Respecto a la violencia intrafamiliar el número de casos nuevos son entre 30 y 35, las mujeres llegan a tramitar la pensión alimenticia, denuncian amenazas, violencia física, verbal o psicológica por parte de su cónyuge y otras solicitan el divorcio.

Aunque antes de tramitar el divorcio, las parejas son sometidas a terapias psicológicas y trabajan la parte conciliatoria, en caso de que no se dé un resultado favorable inicia el proceso, pero ambas partes están convencidos de esa decisión. Contrario a lo que generalmente se piensa, de diez varones sólo dos no aceptan acudir a las sesiones con el psicólogo, “hay mucha respuesta por parte de los hombres, sorprende que hoy en día acepten un apoyo psicológico; esto es un logro porque el tema es muy delicado debido a que las parejas no quieren que la gente sepa que tiene este tipo de problemas”, destacó.

Finalmente la directora del CEAVIF informó que en el tercer trimestre del año fueron impartidos cuatro talleres en los cuales se abordaron temas como la relación de pareja, violencia familiar y violencia en el noviazgo.

“Es difícil que las parejas concluyan esos talleres pero cerca de 80 personas fueron beneficiadas con dicho apoyo y todas ellas concluyeron de manera satisfactoria.”