De diferentes tamaños, colores, gustos, formas y precios se comercializan las tradicionales calabazas de barro para el festejo del Halloween, alimento alusivo y de temporada de Día de Muertos que sirve de adorno en los hogares para darle vida a cada espacio. Los artesanos del municipio de Atlixco —que venden a un costado del libramiento Matamoros— señalaron que estos adornos se venden con éxito a propios y extraños, dejando una entrada económica importante en esta época del año.

Alfredo Aca Flores, alfarero del municipio, trabaja desde hace más de 30 años como artesano en la entidad y junto con otras tres familias suman su creatividad, mano de obra, trabajo, ya que durante los 360 días del año manufacturan y dan vida a imágenes relacionadas con cada época del año, como el Halloween y la Navidad, entre otros.

“Gracias a Dios hemos tenido una excelente respuesta por parte de las familias que visitan Atlixco o deben cruzar por este lugar para llegar a Huaquechula, Izúcar de Matamoros o cualquier municipio de la Mixteca; los precios varían desde 25 pesos, la figura más pequeña, hasta la más grande en 400 pesos”, refierió el artesano.

Explicó que a diferencia de otros lugares o tiendas de prestigio, los precios que manejan no tienen competencia, ya que la gente valora —además del ahorro de hasta 80 por ciento— la extensa variedad de productos hechos con calidad y que ofrecen al público.

A su centro de trabajo, castigado por las autoridades municipales pues le niegan su certificado por uso de suelo han llegado artistas locales, nacionales y extranjeros; personalidades políticas como Enrique Peña Nieto, Javier López Zavala (este último, le dijo que si quería apoyo o asesoría se acercara a una dependencia de gobierno), Enrique Doger Guerrero (quien en repetidas ocasiones ha adquirido algún producto artesanal), entre otras personas que vienen de Hidalgo, Guerrero, Oaxaca, Estado de México y Veracruz, por citar algunos que se llevan consigo un recuerdo hecho en Puebla.

“Nos sentimos orgullosos de ser artesanos, de formar parte de la familia de alfareros que dan vida a los hogares con adornos que forman parte de su decoración; estamos orgullosos también de que personas de otros países reconozcan, admiren y se lleven nuestro trabajo, estamos orgullosos de ser poblanos.”

Finalmente, extendió la invitación a todas las personas que deben transitar por el lugar se detenga a preguntar precios y llevarse un recuerdo para adornar su casa, oficina o negocio.