Tras las presuntas irregularidades que se presentaron durante la jornada electoral del pasado 7 de julio, más de 2 mil ciudadanos del municipio de Rafael Lara Grajales continúan resguardando las oficinas del Consejo Municipal Electoral, pues exigen se realicen nuevas elecciones, sin que hasta la fecha haya acudido alguna autoridad del Instituto Electoral del Estado.

El extravío de actas, la ausencia de representantes del Consejo Municipal Electoral al momento de hacer entrega de los paquetes electorales, los resultados de las diversas casillas en las que se registra una diferencia mínima de votos, son algunas de las presuntas irregularidades que señalan los vecinos del lugar.

Ante estos hechos, Pablo Flores López, representante de la coalición Puebla Unida ante el Consejo Municipal Electoral, anunció que presentarán un recurso de inconformidad ante el Instituto Electoral del Estado de Puebla para solicitar la invalidez de la elección y presentarán las pruebas y evidencias para exigir que se lleve a cabo una elección extraordinaria en este municipio.

“Los habitantes manifiestan su desconfianza al resultado de estas votaciones, ya que no existe coincidencia con las cifras asentadas en actas tanto de representantes de casillas como en las del cómputo preliminar de elección. Además de estar indignados por el uso de las necesidades de la población para favorecer a uno de los aspirantes de la contienda”, aseveró Flores López.

Indicó que otra razón más de inconformidad son los actos de violencia que se vivieron durante la jornada electoral, como la compra de votos, la intimidación a líderes y ciudadanía en general, así como gastos excesivos durante la campaña del candidato Víctor Manuel Gasca Arenas, de la coalición 5 de Mayo, representada por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Verde Ecologista (PVEM).

Las acusaciones y la advertencia

Por otro lado, los ciudadanos inconformes coincidieron en denunciar la intervención personal de Leobardo Soto, líder de la CTM del estado, quien de forma activa participó en la compra de votos, entre mil y 2 mil pesos por persona, a favor de la coalición 5 de Mayo. 

“Previo a las elecciones, representantes de la coalición 5 de Mayo intimidaron a los votantes, compraron votos y gastaron millones en publicidad que evidencian el rebase de topes de gastos de campaña”, sostuvo Marcos Jiménez Silvano, vecino de la cabecera municipal de Grajales.

A su vez, los inconformes de la coalición Puebla Unida adelantaron que preparan las firmas con copias fotostáticas de la credencial de elector de todos los vecinos que fueron testigos de estas anomalías, y mostrarán las evidencias que prueban los excesos y agresiones que se vivieron durante dos meses de campaña, principalmente el día de las elecciones.

Finalmente, los quejosos —que se apostaron a las afueras de las oficinas del Consejo Municipal Electoral desde la madrugada de este lunes— advirtieron que continuarán resguardando el inmueble hasta que el IEE contemple realizar nuevas elecciones en el municipio.