La Arquidiócesis Primada de México y el cardenal Norberto Rivera Carrera condenaron el “cobarde y abominable ataque” ocurrido en Monterrey, Nuevo León, que ha dejado al menos 52 muertos.

La Arquidiócesis señaló que se trata de un ataque contra personas inocentes de la sociedad civil que se suman a las innumerables víctimas de la crueldad y maldad del crimen organizado que, como un látigo azota a nuestro atribulado país.

De igual modo condena el cobarde asesinato del periodista Humberto Millán Salazar, en Culiacán, Sinaloa, cuyo crimen debe ser investigado para castigar a los culpables conforme a la ley.

La Iglesia exhortó a los fieles para que eleven sus oraciones a Dios por el eterno descanso de los que han fallecido, por el consuelo de sus deudos y la conversión de los criminales, y los exhorta a que se comprometan en los ámbitos que a cada uno compete, para alcanzar la paz y la justicia que tanto añoramos en nuestra patria.

Señaló que la Iglesia no dejará de recordar a los responsables de estos y otros actos de violencia, que todos ellos tendrán que rendir cuentas de sus actos ante Dios, quien no tendrá misericordia para quien no tuvo misericordia de sus hermanos y pasa por el mundo dejando una estela de maldad y destrucción.

La Arquidiócesis pidió a Santa María de Guadalupe, Reina de México, interceda por nosotros ante Dios a fin de alcanzar el don de la paz que tanto anhelamos.