En cumplimiento a su compromiso con los damnificados del huracán Manuel, el presidente Enrique Peña Nieto entregó hoy la nueva Pintada, con 125 casas de 80 metros cuadrados con todos los servicios.
Como parte de las obras se entregó una piscina para una comunidad que hace ocho meses enfrentó la pérdida de sus seres queridos y la desaparición de sus casas.
Frente a los habitantes de la nueva Pintada, el jefe del Ejecutivo federal reconoció que los hechos de septiembre pasado marcarán su responsabilidad como presidente de la República “para actuar con oportunidad, siempre eficaz y de forma solidaria” en favor de quienes pasan por momentos difíciles.
Peña Nieto afirmó que en esta comunidad se acredita el esfuerzo de muchas dependencias de su gobierno que seguirán dedicadas a servir a todos los mexicanos.
Además reconoció “el gran valor mostrado” para sobreponerse a la adversidad “y seguir adelante y, sobre todo, embellecer su comunidad” dar este espacio en memoria de los fallecidos “y un mejor lugar para las futuras generaciones”.
En su recorrido por casas, el albergue con baños, la secundaria, el centro educativo, las tiendas, la cafetería e incluso una capilla dedicada al Señor del Huerto, santo patrono de Atlacomulco, el presidente Peña Nieto comentó que ahora ese municipio mexiquense y La Pintada están hermanados.
Ante casas nuevas recién pintadas de rosa, amarillo, azul, rojo y verde, jardines, alberca comunitaria y fuentes, y el agradecimiento sencillo y sincero de los moradores, el mandatario dijo que se lleva el rostro de los hombres y mujeres que pasaron por momentos difíciles pero hoy están de pie y decididos a seguir adelante.
“Están resueltos a dar la vuelta a esta hoja de adversidad y dejar un mejor camino y un mejor lugar para sus hijos”, dijo acompañado por el gobernador del estado, Ángel Aguirre Rivero, y el titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Jorge Carlos Ramírez Marín.
El mandatario federal reconoció la participación de la fundación de empresas privadas que apoyaron con obras para la nueva Pintada y la solidaridad de todos los mexicanos ante los huracanes Ingrid y Manuel.
Peña Nieto se detuvo a leer la placa del monumento que flanqueaba el jardín con los 76 nombres de los fallecidos por el huracán Manuel, que además de agradecerle decía: La naturaleza quiso que este pueblo desapareciera, pero la voluntad de un hombre hizo que resurgiera nuevo y mejor. La Pintada mira al futuro con optimismo.
El mandatario subrayó que regresa a ocho meses de la tragedia como se comprometió, al sitio “más emblemático”, donde además de los daños materiales y pérdidas de viviendas y habitantes “fallecieron también cinco integrantes de la Policía Federal que estaban auxiliado a la comunidad”.
Por ello, aseguró que se rinde homenaje y recuerdo a quienes perdieron la vida en un instante, cuando un alud de tierra por el desgajamiento del cerro sepultó hogares y familias.
En tanto, la señora Juana Castro recordó momentos de la tragedia que se vivió septiembre de 2013; sólo una enorme piedra quedó en el lugar, que los pobladores decidieron dejar en memoria de estos hechos.
“Cuando usted llegó aquí, yo venía en el camino, sólo veía el cerro donde veníamos, pasaron los helicópteros hacia acá, me hice tres días para llegar aquí, con la esperanza de encontrar a mi familia, pero desgraciadamente ya no los encontré con vida. Le doy gracias a usted que no nos dejó solos cuando más lo necesitamos”.
En tanto, el gobernador Aguirre Rivero recordó que hace siete meses tuvieron días de agobio y tristeza, pero ahora La Pintada le hará honor a su nombre, con casas en las que trabajó mano de obra de la propia comunidad.
El mandatario guerrerense reconoció el trabajo del titular de la Sedatu, Jorge Carlos Ramírez Marín, en la entrega las casas que cuentan con tres recámaras, sala, comedor, baño, patio con lavadero y tinaco, y sostuvo que Peña Nieto ganó la presidencia porque supo honrar su lema: “te lo firmo y te lo cumplo”.
Además, el mandatario federal visitó el memorial de las víctimas de La Pintada de Atoyac, que incluía la placa de los cinco policías federales.
Peña Nieto escuchó las palabras de agradecimiento de la comunidad y se tomó la foto con ellos, quienes aseguraron que el presidente de México es una buena persona que quiere a su pueblo.
Las viviendas de forman parte de las 11 mil 900 que se construyen en las diferentes regiones del estado por el gobierno de República.