La integración de los países latinoamericanos debe surgir de estrechar lazos económicos, culturales y de fraternidad; ése debe ser el destino que busquemos como naciones, aseveró el presidente del Senado, Luis Miguel Barbosa Huerta.

Al inaugurar el foro “La Alianza del Pacífico ¿El futuro de la integración latinoamericana?”, planteó que la integración económica entre los pueblos del continente permitirá a las naciones ser más independientes en la definición de sus políticas públicas y sociales.

Expuso que en la nueva realidad del mundo el destino de las naciones está dominado por el control económico influenciado por el imperialismo; “ya no es época del colonialismo, pero sí del control económico de las grandes potencias”.

Barbosa Huerta insistió en que la integración latinoamericana tendrá que darse a través de estrechar lazos económicos, culturales y de fraternidad.

“No puede ser de otra forma en aquellas naciones hermanas que nacieron del encuentro de dos mundos y cuya fusión vio un mestizaje que se expresa en un abanico multicultural y pluriétnico”, subrayó el legislador perredista.

En su oportunidad la senadora priista María del Rocío Pineda Gochi, presidenta de la Comisión de Seguimiento Parlamentario al Acuerdo Marco de la Alianza del Pacífico, aseguró que ese acuerdo es la ruta para multiplicar las oportunidades de crecimiento en Chile, Colombia, Perú y México.

Externó que ese mecanismo “tiene el potencial de transformar de manera cualitativa el espacio regional principalmente en comercio, inversión extranjera directa y en las vinculaciones de cooperación, además de elevar la calidad de vida de las poblaciones y ser palanca de desarrollo que permita consolidar la integración latinoamericana”.

Pineda Gochi destacó que la Alianza es de la mayor trascendencia y se ha convertido en un referente mundial que atrae cada vez más la atención de los países que ven en ese encuentro un gran potencial de desarrollo.

Sin embargo para la senadora panista Gabriela Cuevas Barrón de poco sirve hacer referencia a las ventajas globales de la Alianza si no se ven sus beneficios concretos.

De ahí, dijo, “la importancia de que sea un mecanismo de cooperación tangible para los ciudadanos en temas como la supresión de visas, la promoción del turismo, la cooperación consular y la movilidad estudiantil”.

Cuevas Barrón, quien preside la Comisión de Relaciones Exteriores, consideró que ahora “la tarea más difícil” es poner en práctica una política económica común entre los países que forman parte de este mecanismo, a fin de generar más bienestar, la superación de las desigualdades socioeconómicas y la inclusión social de sus habitantes.

Refirió que ese bloque económico constituye la octava economía y la séptima potencia exportadora a nivel mundial, y equivale a 38 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) de América Latina.

En el foro se presentó el trabajo del Centro de Estudios Internacionales Gilberto Bosques: La Alianza del Pacífico: ¿el futuro de la integración latinoamericana?; y el de la Fundación Friedrich Ebert: Alianza del Pacífico: alcances, competitividades e implicaciones para América Latina. Foto: Twitter @MBarbosaMX