El Consejo Nacional del PRD, tras la elección, designó a Alejandra Barrales, quien fuera Secretaria de Educación Pública en la CDMX como la nueva presidenta del partido.
Tras vencer en las votaciones a Pablo Gómez, Barrales culminará su periodo en octubre de 2017.
Alejandra Barrales Magdaleno asumió este sábado la presidencia nacional del PRD, con el ofrecimiento de trabajar para recuperar su papel como un “partido de oposición”, con independencia y convencida de que lo que se necesita para poder sortear esta etapa difícil es unidad.
Pidió trabajar dentro del Partido de la Revolución Democrática (PRD) “para seguir nuestra propia ruta”, sin tener que salir a buscar a nadie, pues de esa manera, “nos vamos a encontrar con los que estén dispuestos, desde diferentes esfuerzos, a dar la batalla por la transformación”.
Llamó a reposicionar al partido en unidad “y solamente así es que podremos, en el camino, no ir a buscar a nadie, no ir a colocarnos a la cola de nadie, porque igual daño nos hace ser la cola de cualquier izquierda, que ser la cola de cualquier derecha”.
En la reanudación de la sesión plenaria del Consejo Nacional del PRD, en medio de un ríspido debate entre corrientes internas por la posibilidad de buscar alianzas con Morena o con el Partido Acción Nacional (PAN) de cara a la sucesión presidencial de 2018, Barrales Magdaleno fue presentada como candidata por “Vanguardia Progresista”, afín al jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera.
Con 264 votos a favor, por encima de los 58 que obtuvo Pablo Gómez (propuesto por Foro Nuevo Sol), y dos abstenciones, Barrales Magdaleno asumió el cargo e insistió en trabajar juntos “para que podamos recuperar nuestro orgullo como perredistas”.
Reconoció que de cara a la elección de 2018, ninguna fuerza puede alcanzar la Presidencia de la República por sí sola, “pero no debemos caer en ese falso debate por las alianzas, ya está superado para nuestro partido”.
Recordó que el resolutivo Congreso Nacional perredista mandata a buscar las alianzas más amplias, con todas las fuerzas, excepto con el PRI, “que sigue lastimando nuestro país, que no ha cambiado”.
Por ello, insistió en que si el PRD tiene una ruta clara, podrá avanzar en la búsqueda de la transformación y “no tenemos por qué salir a buscar a nadie… a la gente es a la que tenemos que ir a buscar”.
Agradeció el respaldo de los gobernadores de Morelos, Graco Ramírez; Tabasco, Arturo Núñez; Michoacán, Silvano Aureoles, y del jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, quienes fueron electos por las siglas del PRD y respaldaron el esfuerzo de unidad.
Asimismo, resaltó que el PRD tendrá ahora en la presidencia nacional y la secretaría general a dos mujeres, y dijo estar segura que con Beatriz Mojica Morga, titular de la segunda, “haremos un excelente equipo de trabajo”.
La ahora ex secretaria de Educación capitalina dijo tener “los pies bien puestos sobre la tierra” y reconocer que este amplio respaldo a su presidencia no es a una persona, sino que “habla del interés, de la voluntad, el compromiso de salir de una de las etapas más difíciles del partido”.
En la sesión plenaria, algunos consejeros se inconformaron y desplegaron pancartas en que se leía “Barrales oportunista” y “Bautista, pragmático y sin palabra”, de las cuales, la segunda era dirigida a Héctor Bautista, líder de la corriente Alianza Democrática Nacional, quien había comprometido su apoyo a Pablo Gómez y finalmente lo hizo por Barrales.
La nueva presidenta perredista ofreció inclusión, diálogo, trabajo y respeto, y dejó en claro que “el que diga que es un lineazo, no conoce al PRD, ni a sus diferentes liderazgos”.