Los funerales de José Manuel Mireles Valverde, ex vocero de las autodefensas de Michoacán, se realizaron entre pleitos familiares entre su viuda y sus hijos así como su ex esposa.

El cuerpo del también delegado del Instituto de Servicios de Seguridad Social de los Trabajadores del Estado, se llevó al cementerio Jardines de la Concordia, escoltado por dos patrullas de la Policía de Michoacán, con el fin de cremarlo, para ingresar sólo se permitió el acceso a unas cuantas personas.

Entre los que ingresaron al sitio estuvieron su viuda Estefanía Valdés, la ex esposa, Ana Valencia, y el hijo del difunto, Alejandro Mireles, quienes tuvieron una discusión por el destino que tendrán las cenizas.

Valencia y su hijo reclaman la mitad de sus restos y además señalaron que en realidad la voluntad del activista era ser enterrado bajo un árbol de pinzán.

"Lo único que me interesa es que le entreguen las cenizas a mis hijos, porque él (Mireles Valverde) pidió que lo enterraran junto a su madre al pie de un pinzán", dijo Valencia.

La viuda se limitó a decir que quería que recordaran a Mireles Valverde por sus obras en vida y señaló que posteriormente daría explicaciones sobre el conflicto.

"No es justo lo que está sucediendo, porque siempre mentir (...) Lo único que quiero es darles las gracias pedir sus oraciones por él y recordarlo por lo que hizo", expresó Valdés.

Ester Valverde Sandoval, tía de José Manuel Mireles, quien simpatiza con la viuda, señaló que esperaba más respeto para el cadáver de su sobrino y acusó a la primera esposa de haberlo amenazado de muerte cuando este vivía.

"La esposa verdadera que está y es la que le dio amor durante todos estos años es la que tiene derecho a recoger sus cenizas y estar cerca de él", concluyó Valverde.

Al momento no se ha llegado a un acuerdo sobre el destino de las cenizas.

Con información de Red 113 Michoacán.