El Senado aprobó la creación del Padrón Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil (Panaut), por lo que ahora los clientes tendrán la obligación de entregar información biométrica, en caso de negarse, se procederá a cancelar su línea telefónica.
Es decir, los clientes o usuarios de dispositivos móviles, sin importar la compañía telefónica, deberán otorgar nombre, identificación oficial con fotografía, domicilio, número de teléfono, huellas dactilares, entre otros.
Aquellos usuarios con líneas preexistentes contarán con dos años para dar sus datos, sin embargo, para los nuevos usuarios el tiempo límite es de seis meses. En caso de no acudir, los usuarios perderán sus líneas sin poder acceder a la reactivación o recibir indemnización.
Las sanciones que se aplicarían a quienes decidan incumplir con este padrón, irán desde las 20 hasta las 15 mil Unidades de Medida y Actualización (UMAs), algo equivalente a mil 792 pesos y hasta un millón 344 mil 300 pesos.
El responsable de operar y regular el padrón será el Instituto Federal de Telecomunicaciones, mientras que los concesionarios de telecomunicaciones darán la información relativa a las altas, bajas, cambios de propietarios, robo y extravío.