La diputada María Clemente García Moreno (Morena) informó que determinó posponer el análisis de su iniciativa que reforma la Ley Federal del Trabajo para reconocer el trabajo sexual como una actividad laboral lícita entre personas mayores de 18 años de edad y se ejerza de manera libre y autónoma.

“Se pospone las mesas de análisis de la iniciativa 15 días más, con el objetivo de realizar previamente recorridos por las zonas donde se ejerce este oficio, en la zona metropolitana y consultar a las trabajadoras sexuales”, indicó.

En conferencia de prensa, sostuvo que el objetivo de esta propuesta es incluir en el marco jurídico este oficio que ha estado en la clandestinidad y reconocer los derechos de estas personas.

Expuso que la polémica del debate en torno al reconocimiento de los derechos laborales de las personas trabajadoras sexuales no puede entenderse sin una larga historia de sujeción y tutela sobre el cuerpo y la sexualidad de las mujeres.

“Sólo se comprende a la luz del estigma social que ha formado los imaginarios represivos en nuestra cultura. No es casualidad que en pleno siglo 21 la sexualidad humana y particularmente la que atañe directamente a nosotras las personas de la diversidad sexual y las mujeres siga constituyendo un tema abandonado por la agenda legislativa de la mayoría de las fuerzas políticas”, aseveró.

García Moreno subrayó que tampoco resulta extraño que durante un proceso de profunda transformación social y política como la que hoy vivimos, las fuerzas más retardatarias de nuestra sociedad confabulen en añejos bastiones ideológicos del antiguo régimen al pánico moral y a la represión de la sexualidad humana.

“La concepción teórica de la división sexual del trabajo daría una justificación a la exclusión histórica y sistémica de las mujeres en ciertos ámbitos de la vida social. Lo masculino estaría marcado por el espacio público, lo productivo, el progreso, lo científico, la lógica, el comercio y finalmente la política, frente al espacio privado. Lo femenino, lo reproductivo, lo emocional, lo no remunerado como ahora me seduce a mí con mis colegas parlamentarios que quieren gobernar y discutir la esfera privada de mi cuerpo y mi derecho a decidir”, dijo.

No obstante, apuntó que a principios del siglo 20 se comenzó a avanzar con pasos significativos hacia la autonomía de los propios cuerpos.

“Las mujeres ahora reconocemos nuestros cuerpos capaces de sentir deseo y disfrutar de la sexualidad sin la justificación ideológica del amor romántico”, externó.

La diputada de Morena destacó la labor de las activistas que han luchado por la reivindicación de los derechos de las mujeres y por el reconocimiento del trabajo sexual.