El cártel de "Los Chapitos", liderado por los hijos de Joaquín "El Chapo" Guzmán, ha sido señalado por las autoridades como responsable de la reciente masacre en el centro de rehabilitación Shaddai, ubicado en Mazatlán, Sinaloa.

Este ataque, que dejó múltiples víctimas, subraya la creciente violencia en la región debido a disputas entre facciones del crimen organizado.

Según informes de la Secretaría de Seguridad Pública de Sinaloa, "Los Chapitos" han utilizado centros de rehabilitación para ocultar a sus miembros y reclutar nuevos elementos.

En diciembre de 2024, se reportó que 16 internos de un centro de rehabilitación en Mazatlán abandonaron voluntariamente las instalaciones para unirse a un grupo armado que les prometió empleo. 

Además, en diciembre de 2024, un centro de rehabilitación en Mazatlán fue incendiado por un grupo armado, resultando en un muerto y 18 heridos. Este incidente se enmarca en la escalada de violencia entre las facciones de "Los Chapitos" y "Los Mayos" en la región. 

Estos hechos evidencian la estrategia de "Los Chapitos" de infiltrar y utilizar centros de rehabilitación en Sinaloa para sus operaciones, lo que ha generado preocupación entre las autoridades y la sociedad civil.

La violencia en estos establecimientos pone en riesgo a personas que buscan rehabilitación y refleja la compleja situación de seguridad en el estado.