La presidenta Claudia Sheinbaum rechazó las acusaciones sin fundamentos del Gobierno de Ecuador sobre la supuesta participación de sicarios mexicanos en un presunto plan para atentar contra el presidente Daniel Noboa.
El Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas de Ecuador emitió el pasado 17 de abril una alerta sobre posibles amenazas a la seguridad de Daniel Noboa, de su gabinete ministerial y su equipo de trabajo por parte de grupos delincuenciales, entre los que estarían presuntos sicarios de México y otros países.
"Además, no dicen ni siquiera de dónde venía la información o cuáles son sus pruebas", dijo, y señaló que se emitió una respuesta oficial desde la cancillería mexicana negando las declaraciones.
Sheinbaum leyó parte del comunicado en el que el Gobierno mexicano rechazó "tajantemente la reiterada e inescrupulosa creación de narrativas en comunicados oficiales y/o filtraciones de documentos oficiales, que aludan a México como fuente de supuestos actos delictivos o situaciones internas" en Ecuador.
Reiteró que las relaciones diplomáticas siguen rotas desde el asalto a la Embajada de México en Quito, ocurrido en abril del 2024, un ataque que calificó como una "grave y flagrante violación al derecho internacional".
El 5 de abril de 2024, fuerzas policiales ecuatorianas irrumpieron violentamente en la embajada mexicana en Quito para capturar al exvicepresidente, Jorge Glas, sentenciado por casos de corrupción y quien desde el 17 de diciembre de 2023 permanecía refugiado en la sede diplomática.
El Gobierno mexicano le había concedido el asilo político horas antes del asalto. Un día después, el entonces presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, decidió romper relaciones con Ecuador hasta no se libere a Glas y se pida una disculpa.