Arropado por los poblanos, entre porras y el entusiasmo de un público ad hoc ‚Äîque desde las 8 de la mañana arribó al parque Flor del Bosque‚Äî el mandatario Felipe Calderón Hinojosa disertó durante media hora sobre los incendios forestales, su nueva relación con el gobierno de Puebla y el cambio climático.
En su primera visita a Puebla durante la era morenovallista, Rafael Moreno Valle y Felipe Calderón Hinojosa vivieron una luna de miel política.
"Bienvenido, señor presidente. Puebla lo recibe con los brazos abiertos. Estoy seguro de que ésta será la primera de muchas visitas a nuestro estado", fue la manera como Rafael Moreno Valle recibió al presidente de México.
Como si estuviera en su propio sueño místico en cámara lenta, el gobernador del estado no se cansó de disfrutar su buena relación con el presidente de la República.
Atrás quedaron las visitas en las que el presidente de la República trataba con desdén al gobernante anterior.
A continuación, el gobernador de Puebla elogió de nueva cuenta al primer mandatario de México y desglosó el pasado inmediato del país en el ámbito electoral: "hace cinco años me sumé a su proyecto para transformar a México. Alcanzamos lo que para muchos, en su momento, parecía imposible. Usted, como candidato a la presidencia, y yo como candidato a senador.
"Siempre me inspiró su visión de un México ganador, el carácter y la convicción que lo distinguen, antes como candidato y hoy como presidente de la República."
Los asistentes a la ceremonia rompieron en aplausos.
El gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, intensificó su rosario de alusiones: "tenga la plena seguridad de que en mi gobierno tendrá un aliado incondicional a favor del desarrollo de México.
"Cuando pase el tiempo de nuestra generación, no seremos recordados por lo difícil de los retos que enfrentamos o por nuestras palabras, sino por el valor y la eficacia de nuestras acciones."
Sin disminuir en su reconocimiento hacia el presidente de la República, Moreno Valle abundó: "agradezco de manera especial que el primer mandatario de nuestro país haya elegido al estado de Puebla para dar inicio a la Campaña Nacional para la Protección Contra Incendios 2011. A la confianza depositada, habremos de responder con resultados."
El gobernador poblano cerró su discurso con una apología exprés de la transición y la alternancia:
"Hace catorce días se dio el cambio de gobierno en la entidad. Como en todas las democracias, las nuevas administraciones generan grandes expectativas. En Puebla la esperanza es aún mayor por ser la primera vez que hay alternancia política, y más esperanza significa mayor compromiso.
"Por ello, señor presidente, en nombre de los poblanos le agradezco que hoy refrende su compromiso con nuestro estado. Veo el futuro con optimismo porque sé que contamos con su apoyo.
"Además, he encontrado la disposición de los legisladores locales y federales de trabajar al margen de colores partidistas para construir una Puebla más justa y más equitativa. Pero, sobre todo, me entusiasma que hoy en Puebla exista un renovado ánimo social."
Rafael Moreno Valle, en un sprint final dijo: "con su apoyo, con la fuerza de todos y con acciones que transforman, vamos a devolverle a Puebla el lugar que le corresponde entre los estados del país y ante el mundo. Llegó la hora de la acción. Llegó la hora de la corresponsabilidad. Llegó la hora de transformar a Puebla, a partir de logros concretos que nos acerquen al futuro que siempre hemos imaginado".
En el memorable día de San Valentín de la etapa morenovallista, Calderón y Moreno Valle vivieron como un sueño de terciopelo.
Felipe Calderón Hinojosa respondió a las amabilidades del gobernador Moreno Valle. La plena coincidencia entre los dos políticos emanados del blanquiazul, y que hicieron campaña en 2006, uno por la presidencia de la República y otro por el Senado fue manifiesta:
"Primero que nada, qué gusto estar en Puebla, y además ésta es la primera, y como bien ha dicho el gobernador, la primera de muchas, muchas visitas que voy a hacer al estado de Puebla en esta administración.
"Tengo una plena identificación de proyectos, una identificación generacional, una identificación de visión y amor a México con el gobernador Moreno Valle. Así que, gobernador, vamos a trabajar juntos muy, muy fuerte por Puebla, y por México. Cuente con todo el apoyo del gobierno federal."
Calderón, quien en sus visitas a Puebla había sido parco, se desató durante casi media hora hablando de su gobierno, de su relación con Puebla y de los incendios forestales: "las áreas naturales protegidas ya alcanzan 26 millones de hectáreas en nuestro México; es decir, 13 por ciento del territorio nacional ya es área natural protegida. Esto equivale, hagan de cuenta, a que el estado de Chihuahua, el estado más grande del país, una superficie equivalente a todo el estado de Chihuahua ya es área natural protegida en México.
"Estos resultados se pueden ampliar si trabajamos codo con codo, como lo vamos a hacer con el gobernador Moreno Valle y su equipo, con Amy Camacho. En fin, con todo su equipo comprometido con el medio ambiente.
"Por eso hoy firmaron el gobernador y el secretario del Medio Ambiente federal el Convenio de Coordinación sobre Acciones para la Sustentabilidad Ambiental en el estado de Puebla.
"Este convenio garantiza recursos inéditos para Puebla en esta materia. Tres mil 500 millones de pesos, que atenderán demandas de poblanos en materia de agua, saneamiento, medio ambiente y desarrollo forestal.
"Es una cifra histórica que estamos poniendo los dos gobiernos, fruto de la suma de inversiones, fruto del esfuerzo de la sociedad civil y fruto de la iniciativa privada en el estado de Puebla."
En la cercanía de Flor de Bosque, tanques artillados, policías de la PFP, policías estatales con vallas metálicas, vigilaban el acto. Para cruzar a Flor del Bosque había que pasar varios controles del Estado Mayor Presidencial. En las calles aledañas al parque ecológico se encontraban estacionados camiones que desde temprana hora habían arribado al lugar para llevar a los asistentes que ingresaban en grupos al parque. Con minuciosidad el Estado Mayor Presidencial vigilaba el ingreso de los campesinos al sitio. Más de un centenar de guardias forestales, uniformados con camisolas amarillas, como si fueran participantes de algún reality show de Bob El Constructor ‚Äîla referencia televisiva es inevitable‚Äî aguardaban la llegada del presidente de la República.
El público era a modo para el mandatario de México. Luego de la espera, aparecieron en el aire los helicópteros. Uno a uno aterrizaron a unos cuantos metros de una vivienda de mampostería, levantando una gran polvareda.
Bajo la carpa donde esperaban al presidente de la República, los asistentes aplaudieron cuando apareció el último helicóptero y se levantaron de sus lugares.
La expectativa del auditorio era afín al sentido presidencial.
Una voz anunció la llegada de Felipe Calderón Hinojosa. Lo acompañaba el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle. Entre aplausos fue recibida la pareja del poder estatal y nacional. Al pasar entre las vallas, el gobernador estiraba sus manos para saludar a los asistentes: lo mismo personal de Semarnat que personas del campo.
La rondalla universitaria recibió al presidente de la República, con las notas del "Cielito Lindo". Gracias a la rondalla la tediosa espera se atenúo y cuando apareció el gobernante, su cómodo auditorio lo arropó.