El cónclave del Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (Comce) le permitió al presidente de la República, Felipe Calderón Hinojosa, un foro idóneo —cómodo, entre aplausos y sin cuestionamientos— para “cerrar filas” con el empresariado y recordarle al Congreso la urgencia de aprobar las reformas estructurales impulsadas por el Ejecutivo.
Calderón censuró la actitud de los legisladores que se oponen a sus reformas:
"El oponerse a reformas como ésta, cuando ya están consensuadas, el hacerlo por mero interés político, es realmente hacerle un daño al país", dijo un presidente, en empatía con el imaginario de la clase empresarial.
Al amparo de la clausura de los trabajos del Comce, el ruego empresarial para la aprobación de las reformas presidenciales que se encuentran estancadas en San Lázaro por la polarización de las fuerzas políticas.
A unos cuantos meses del inicio del proceso electoral para relevar al representante del Poder Ejecutivo, y ante el rechazo de los bloques parlamentarios del PRI y el PRD por discutir las iniciativas presidenciales en materia laboral, los empresarios y el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, dieron la cara por el presidente Calderón Hinojosa en un exhorto a favor de la competitividad para que el Congreso apruebe las reformas del presidente.
Discursos a favor de la apertura comercial que finalizaron con un llamado al Congreso —es decir, a los diputados del PRI, PRD y PT, aunque evitando mencionar sus filiaciones políticas— para aprobar el paquete de reformas estructurales, añeja y sentida demanda de la élite empresarial en sus distintas presentaciones.
Con el espaldarazo de los empresarios agrupados en el Comce, el presidente de la República se sintió a sus anchas desde el Centro Expositor de esta ciudad, en la tercera visita a Puebla en menos de un mes.
En su intervención, Valentín Díez Morodo, presidente del Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (Comce) elogió la política de Felipe Calderón en materia de seguridad y la vertical manera de enfrentar los problemas del país sin reparar los costos políticos: “importante es señalar que usted no ha eludido los problemas, los ha enfrentado, haciendo caso omiso de los costos políticos. Y nosotros como empresarios también asumimos nuestra responsabilidad, buscando que se continúe con la realización de las reformas necesarias para que México pueda ser más competitivo a nivel mundial.”
Al espaldarazo se sumó el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, quien elogió la apertura comercial llevada a cabo en nuestro país.
Y en sintonía con el Comce y el presidente de la República, Moreno Valle también se unió al llamado al Congreso federal para llevar a cabo las reformas estructurales: “posponer las reformas estructurales que requiere México nos pone en desventaja frente a nuestros competidores. Lo que hagamos o dejemos de hacer hoy, tendrá un impacto en nuestra capacidad presente y futura para competir. Lo que hagamos o dejemos de hacer hoy, determinará el futuro del país y el bienestar de sus habitantes”.
El gobernante de Puebla afirmó que hacer de México un “país competitivo” no puede ser la propuesta de una sola fuerza política.
Y con una frase digna del manual neoliberal sentenció: “en otras palabras, un verdadero compromiso con la competitividad debe poner la técnica al servicio de la política y la política al servicio del progreso.”
El espaldarazo empresarial
El presidente del Comce, Valentín Díez Morodo exigió al Congreso la aprobación de las reformas estructurales: “sin duda alguna, los empresarios mexicanos hemos visto con agrado y aplaudimos los logros alcanzados en materia de competencia. Sin embargo, no hemos avanzado en otros campos en los que se requieren las reformas estructurales, como son el caso de la reforma política, la energética, la fiscal y la laboral, por lo que subrayamos la necesidad de que el Poder Ejecutivo y el Legislativo, hagan a un lado las tendencias partidistas y realicen su mejor esfuerzo a fin de que se establezcan políticas públicas acordes con las necesidades de nuestro país”.
Morodo subrayó que para efectuar las reformas estructurales se requiere dejar a un lado el partidismo.
“En suma, podemos decir que las actividades desarrolladas en nuestro Congreso han tenido un objetivo muy claro: determinar los elementos que hay que impulsar para lograr la incorporación de mayor competitividad e innovación en nuestro proceso de exportación.”
Defiende Calderón sus reformas
El presidente Felipe Calderón Hinojosa realizó una amplia exposición de cómo la apertura comercial, la vecindad con los Estados Unidos y el crecimiento de las exportaciones detonarán la economía para mejorar las condiciones de vida de los mexicanos.
En su disertación ante los empresarios de la Comce, el presidente de México afirmó que frente a otros países como China que ofrecen mano de obra barata, México ofrece una mano de obra calificada y preparada, y hasta acuñó un término la “intelimanufactura”, para explicar cómo la manufactura preparada representa una ventaja frente a otros países.
El presidente Calderón auguró un crecimiento en las economías de países de América en un futuro cercano, por lo que afirmó que es urgente la aprobación de la reforma laboral, la cual ha sido criticada por distintas organizaciones de trabajadores por su carácter regresivo en contra de los derechos laborales.
En tono de épica neoliberal, el presidente asentó: "México no puede esperar, por razones de conveniencia, algo que necesita con tanta urgencia.
”El oponerse a reformas como ésta, cuando ya están consensuadas, el hacerlo por mero interés político, es realmente hacerle un daño al país", dijo un Calderón compenetrado con el sentir de la clase empresarial.
El gobernador de Puebla apeló a borrar las diferencias ideológicas para aprobar un nuevo marco jurídico favorable a los deseos empresariales: “independientemente de diferencias ideológicas o partidistas, debemos iniciar cuanto antes un ejercicio de análisis y prospectiva para discutir hacia dónde van la sociedad del conocimiento, la educación en la era digital, las telecomunicaciones, la investigación científica y la innovación tecnológica, la economía verde, los clústers de desarrollo, el mercado laboral y los grandes bloques económicos”.