Analistas consultados sobre la posibilidad de que esta práctica pueda dar resultados en Puebla consideraron que la ley no es flexible por el porcentaje de participación que pide, de acuerdo al listado nominal y candados para que los institutos políticos como los partidos puedan participar en la organización y promoción.
Señalaron que las dos figuras jurídicas son muy importantes, tanto el plebiscito como el referéndum, junto con otras como la iniciativa popular o la revocación de mandato pues se pasa de la democracia electoral o representativa a la participativa.
Sin embargo, advirtieron que debe anotarse como premisa que no es una concesión del gobierno del estado, eso lo deben saber todos y eso engrandece y viste a quien presenta la iniciativa y a quienes la aprueben significará un gran reconocimiento de la autoridad que fue constituida y elegida por los electores activos que ahora, de manera consciente, dicen “reconozcamos algo que es un derecho genuino de los habitantes, de la población”
Insistieron en que no es una concesión, es un paso fundamental para que todos los actos de gobierno por un lado o todas las leyes que no estén acorde con los intereses de la inmensa mayoría de los ciudadanos puedan ser precisamente cuestionados y puedan ser decididos, opinados, valorados y evaluados por los propios ciudadanos.
Actualmente la Constitución establece las dos figuras, la reforma fue en el sexenio de Melquiades Morales, donde se establece que 40 por ciento de quienes están en la lista nominal sean los que deban votar, ahora se hace que sea 30 por ciento.
Si actualmente hay 3 millones 752 mil 422 electores, de acuerdo con el listado nominal federal de 2009, 30 por ciento equivale a un millón 125 726 mil electores.
Explicaron que esto debe dejarse como un dato, pues se pone como condición que sea un millón 215 mil electores y habría que anotar, plantear si hay capacidad para que las organizaciones civiles movilicen esta cantidad de poblanos.
Reconocieron que eso no invalida la buena intención el buen propósito en la presentación de estas dos figuras sin embargo indicaron “por qué no plantear en lugar de 30 por ciento, que sea 20 por ciento, porque además los ciudadanos no tienen a su alcance ni los recursos públicos ni nada para inmediatamente comunicarse y organizarse, sólo las redes sociales para que puedan hacer efectivo ese derecho que no es una concesión del estado”.
Indicaron que ese 20 por ciento serían 750 mil 484 personas, pero debe recordarse que para elegir al gobernador fueron un millón 100 mil votos en una situación extraordinaria.
Aclararon que no hay que equiparar un derecho que es propio de los ciudadanos porque la autoridad fue electa para ser gerente, ser responsables de la administración de los recursos, no para hacerlos dueños del poder o de la representación. Además cuestionaron que los partidos políticos queden fuera de los plebiscitos y referendos pues son instituciones de interés público.
Comentaron que digan cuáles son los argumentos para que los partidos políticos no tengan derecho a participar en los plebiscitos ni el referéndum si son instituciones de interés públicos. Las propias Constituciones tanto la federal como la del estado establecen que los partidos políticos estarán conformados por ciudadanos no por corporaciones, lo que significa que no hay contradicción y queda esa interrogante.
Entre las cifras que manejaron se encuentra la elección federal del 5 de julio de 2009 cuando votaron un millón 431 poblanos, 38 por ciento de la población.
Entre las cifras que manejaron se encuentra la elección federal del 5 de julio de 2009 cuando votaron un millón 431 poblanos, 38 por ciento de la población.
Sin embargo, los especialistas indicaron que para esa elección hubo publicidad constante del Instituto Federal Electoral, la participación de al menos cinco fuerzas políticas cada una presentando 16 candidatos a diputados. Tuvieron dos meses de campaña política y la utilización de los recursos de los partidos.
Advirtieron que esta medida podría llevar la intención de no lograr esa participación y no dejen de ser una fantasía los referendos y plebiscitos en Puebla