En un spot de la campaña electoral de 2010 a la gubernatura, el candidato de Compromiso por Puebla, Rafael Moreno Valle, aparece a cuadro diciendo: “Muchas personas piensan que pasar horas y horas en el tráfico es parte de la vida. Abre los ojos, esto no tiene que ser así; en mi gobierno construiré el metrobús, un sistema de transporte público accesible y económico para que los poblanos no demoremos horas en el tráfico. Abre los ojos. La Puebla que todos soñamos está mucho más cerca”.

En el spot de 34 segundos, el candidato Moreno Valle exponía lo que sería su principal promesa de campaña. La promesa de campaña a la que le empeñó una buena parte de su capital política conservará su nombre pero sin las características originales del proyecto anunciado: los autobuses articulados de piso alto, remedando su promesa de un “transporte público, accesible y económico”.

Apenas el viernes pasado cuando Intolerancia Diario, a través del periodista Enrique Núñez Quiroz, dio a conocer que el metrobús ocuparía únicamente dos autobuses articulados, la Secretaría de Transportes viró en sus afirmaciones originales: el proyecto se mantiene pero sin los 45 autobuses articulados prometidos cuando las autoridades estatales anunciaron el proyecto, en su lugar serán 99 autobuses y seis autobuses articulados. 

A favor del cambio súbito en el proyecto, la secretaría señaló que no puede haber autobuses articulados circulando cuando los usuarios se encuentren en sus trabajo, y que los transportistas quienes deben comprar los autobuses articulados de piso alto no puede “perder dinero”. 

A pesar de ser el principal proyecto de la administración estatal, la información proporcionada a los ciudadanos ha sido parcial, contradictoria y a cuentagotas. 

Una vez que se anunció el proyecto se ha modificado el mismo y cuando más se ha mantenido en secreto información sobre el mismo, a pesar del impacto: afectará la vida de unos 400 mil usuarios de transporte. Desde hace tres años en plena campaña a la gubernatura, Rafael Moreno Valle abanderó como una de sus principales causas: el tema del metrobús. Al tomar protesta como gobernador constitucional de Puebla Rafael Moreno Valle, el 1 de febrero del 2011 anunció como una de sus obras prioritarias para su primer trienio de gobierno la construcción del metrobús. 

Uno de los principales rasgos de la construcción del metrobús ha sido la falta de información clara y completa sobre el sistema de transporte.  La dependencia ha proporcionado información reaccionando a las publicaciones sobre el metrobús por parte de los medios de comunicación. En el mismo proyecto se han privilegiado los intereses de los concesionarios del transporte público que las necesidades de los ciudadanos. Primero, con el precio del transporte y el plazo de la concesión del metrobús. Luego, con el tipo de autobuses que se ocuparán en el sistema. El proyecto planteó por recomendaciones técnicas ocupar autobuses articulados de piso alto, como ya se hace en el sistema de metrobús del Distrito Federal, amén de que la administración estatal firmó un convenio de asesoría sobre el metrobús con el gobierno del Distrito Federal donde se ocupan los autobuses articulados. 

El Congreso local modificó el pasado mes 31 de julio la Ley de Transporte para definir el sistema de transporte que contempla el metrobús. 

Además, la reforma estableció que la concesión del metrobús será hasta por 30 años y aumentará anualmente el precio del boleto, a pesar de las críticas de diputados de oposición sobre la ausencia de un enfoque social en este transporte. Es más, el diputado panista Jorge Garcilazo consideró positivo que la tarifa aprobada para el metrobús fue de 7.50 pesos, ya que la inversión del sistema de metrobús fue elevada y los empresarios deben recuperar sus costos.

En los meses posteriores al anuncio de la construcción del metrobús se dio a conocer, a cuentagotas, información parcial sobre la construcción de la vía de transporte prometida. La administración estatal exaltó como una de las virtudes y rasgos esenciales del denominado programa Sectorial de Movilidad Metropolitana de la Ciudad de Puebla, que el tipo de transporte que se ocuparía para el troncal Chachapa-Tlaxcalancingo sería “articulado”. 

El 1 de mayo del 2011 al iniciarse las obras del metrobús, las autoridades de la ST insistieron en que el tipo de autobuses que se ocuparían para el primer troncal del metrobús sería “articulado”. Y hasta cifras proporcionaron las autoridades: 40 vehículos articulados más cinco de reserva para transitar sobre los carriles confinados. De manera sistemática, en entrevistas, en información publicada en la página web ruta.puebla, en videos y spots gubernamentales, y en la información sobre el metrobús se ratificaba que el sistema de transporte metropolitano de Puebla, ruta que estaría constituida por 45 autobuses de tipo “articulado”.

De acuerdo con los propios documentos estatales, la infraestructura del metrobús como los carriles confinados, serían construidos por el gobierno del estado de Puebla. La compra de los vehículos estaría en manos de los concesionarios quienes se agruparían para comprar este tipo de autobuses, cuyo costo llega en algunos casos hasta los 5 millones de pesos y cuentan con tecnologías sustentables y ecológicas. 

Todavía el pasado 12 de agosto, en la explanda del estadio Cuauhtémoc se realizó la presentación por parte de la empresa Volvo de autobuses articulados con tecnología de primera línea:

“Volvo exhibió ante autoridades, transportistas y público en general de la ciudad de Puebla autobuses articulados modelo 7300 Access, de entrada baja y 7700 Híbrido diesel-eléctrico de piso bajo completo. El Volvo 7300 se ha consolidado como el autobús BRT cuenta con más de 270 unidades en operación en cuatro ciudades mexicanas y actualmente satisface la norma de emisiones Euro 5. El estándar Euro 5 optimiza el rendimiento de combustible en 5 por ciento y reduce las emisiones contaminantes.

”El Volvo Access fue uno de los preferidos durante la demostración gracias a su entrada baja y confortables interiores. Los Volvo Access prestan servicio actualmente en las ciudades de Tijuana y Cancún.” 

La defensa de los autobuses articulados por la propia SCT

En la página de internet http://www.ruta.puebla.gob.mx, en la sección sobre el Plan Movilidad de Puebla se afirma de manera tajante que en la ruta del metrobús Chachapa-Tlaxcalancigo se ocuparán autobuses articulados, lo que significa que el uso de este tipo de autobuses es esencial al proyecto mismo del metrobús:

“¿Todos serán autobuses articulados?

”En la troncal se tiene dimensionado alrededor de 40 autobuses articulados (contemplando un 10% de reserva), con capacidad de 160 pasajeros, con una frecuencia de aproximadamente 3 minutos entre cada autobús en hora pico, circulando a una velocidad promedio de 25 km/hr.

”En el caso de las rutas alimentadoras estarán operando 150 autobuses con capacidad de 90 pasajeros. Cabe mencionar que éstos no serán de nueva adquisición, sino serán los que actualmente están circulando, previo a una selección según su modelo y estado físico mecánico.”

En la página 19 del documento “Sistema Integrado de Transporte del área metropolitana de la Ciudad de Puebla” se señala que de acuerdo con recomendaciones del Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo se ocuparán Autobuses Articulados de Piso Alto.  En la página 22 de la presentación se documentan consideraciones técnicas y ambientales a favor del uso de autobuses articulados. En dicha argumentación se sostiene que sobre la ruta Chachapa-Tlaxcalancigo se sustituirán 746 unidades por 45 unidades BRT señalando que “746 unidades que dejan de transitar sobre el corredor. Disminución estimada de 17.62 toneladas anuales de partículas contaminantes.

”Utilización de tecnología limpia para la iluminación de los paraderos.

”Se retiran 3,017 árboles sobre el corredor que se sustituirán con 1,000 nuevos.

Menos ruido y menos contaminación ambiental.”