Al rendir su primer y último informe como auditor del Órgano Superior de Fiscalización, ya que a partir del 1 de enero el nombre oficial del organismo será Auditoría Superior del Estado de Puebla, David Villanueva Lomelí advirtió que habrá “cero tolerancia” en la revisión de las cuentas públicas de los sujetos de revisión, e indicó que hay un incremento en la eficiencia del Órgano Superior de Fiscalización. En su mensaje ante los representantes de los tres Poderes locales, el contador indicó que se aplicaron 500 medidas de apremio que derivaron en sanciones económicas en contra de funcionarios que violaron la ley.
A un año de que tomó posesión como titular del organismo en sustitución de Víctor Manuel Hernández Quintana, el auditor sostuvo que se cerrará todo el paso a la corrupción e informó que se terminó con el rezago que se tenía de 159 cuentas que se tenían pendientes. David Villanueva Lomelí afirmó que la labor que realiza esta institución es hoy un elemento fundamental para promover y fortalecer la rendición de cuentas y será un ente fiscalizador, íntegro y con rumbo que garantice la cercanía con los ciudadanos.
“El Órgano de Fiscalización Superior no solapará a los funcionarios que le den un mal uso a los recursos públicos. No hay marcha atrás en la lucha contra la corrupción, no habrá tolerancia a las irregularidades que cometan los sujetos de revisión”.
Destacó que en su trabajo hay cuentas claras y que en su gestión se han incrementado las auditorías 80 por ciento. En el rubro de capacitación, dijo, se brindaron 3 mil asesorías y realizaron más visitas a los 217 municipios, incluso subrayó que gracias al portal de transparencia se redujo en 40 por ciento los tiempos de atención a los sujetos de revisión en esta materia.
Comentó que se aplicaron 500 sanciones, además que se triplicaron los inicios de procedimientos administrativos de determinación de responsabilidades. Mientras, David Colmenares Páramo, auditor especial de Gasto Federalizado de la Auditoría Superior de la Federación, reconoció el trabajo del Ejecutivo y aseguró que, a nivel nacional, Puebla destaca en materia de fiscalización con un órgano que está a la altura para la fiscalización.
Por su parte, el gobernador Rafael Moreno Valle aseguró que la fiscalización superior “nos permite combatir la corrupción, a impunidad y fomentar la eficiencia en el servicio público”. No obstante, refrendó el compromiso de su administración con la rendición de cuentas y entregó oficialmente en propiedad el inmueble que ocupa el organismo ubicado en la calle 5 Sur, donde estaba el convento de las Religiosas del Sagrado Corazón de Jesús.
Moreno Valle recordó que el Congreso del estado aprobó una modificación a la Constitución que permite crear la Auditoría Superior del Estado de Puebla.
Los amparados
El presidente de la Comisión Inspectora, Mario Riestra Piña, informó que son 30 cuentas las que se encuentran pendientes de ser dictaminadas y éstas corresponden al año 2010, y se espera que mañana viernes 10 de ellas sean calificadas y en lo que resta del año serán 10 más.
Comentó que son 10 sujetos de revisión los que se ampararon en contra del proceso que lleva a cabo el Órgano de Fiscalización Superior y entre quienes interpusieron los recursos se encuentran el expresidente municipal de Texmelucán, Noé Peñaloza, así como el extitular de SOAPAP, Eduardo Macip Zúñiga, entre otros. Indicó que habrá que esperar lo que determinen las autoridades para que se pueda proseguir la revisión de las cuentas de dichos sujetos y aseguró que se está actuando conforme a la ley. Aclaró que en el caso de la cuenta pública de la expresidenta municipal de la capital y hoy senadora, Blanca Alcalá Ruiz, por su volumen está siendo analizada detenidamente y corresponde al periodo 2010, pero se estima que antes de que termine el año será dictaminada por el pleno.
Riestra Piña comentó que con esta revisión de cuentas el órgano fiscalizador estará al corriente terminando con el rezago y se permitirá mejorar el adecuado manejo de los recursos públicos.