El líder del tricolor, Pablo Fernández del Campo, señaló que la próxima bancada del PRI será de oposición en el Congreso local.
Pablo Fernández del Campo, en declaraciones a varios medios de comunicación, resaltó que la postura de la nueva bancada tricolor que tomará protesta el 15 de febrero del 2014 será de contrapesos y de equilibrios, porque esa es la instrucción del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del expartidazo.
El dirigente del PRI —que arribará a la próxima Legislatura a través del primer lugar de la lista plurinominal— aseguró que los priistas se están comportando como oposición.
Pablo Fernández del Campo señaló que “el PRI es un partido de oposición”.
El pasado viernes, los diputados electos del PRI se reunieron con el Comité Ejecutivo Nacional para la agenda legislativa: “Tenemos tiempo suficiente, esto y otros temas serán motivos”.
Fernández del Campo aseguró que la bancada electa del PRI cuenta con experiencia legislativa: “Es un grupo muy calificado, los diputados electos del PRI ya fueron diputados y esto le da una riqueza a este grupo de diputados electos que nos reuniremos de manera permanente”.
El dirigente partidista confió en que los diputados de su partido atenderán las necesidades de los priistas y de los ciudadanos: “Es un grupo que en la experiencia, en la calidad y en las ganas de trabajar por Puebla y por el Congreso lo vamos a estar haciendo sobretodo representando muy dignamente a los poblanos y a la militancia priista”.
El legislador plurinominal electo definió que su partido sí es de oposición: “Venimos comportándonos los priistas como una oposición y luego eso llama la atención y sorprende a muchos. Hay que recordar que somos un partido de oposición dentro de la legalidad y de la sana política, generando equilibrios en el estado de Puebla”.
El diputado electo y delegado presidente del PRI en el estado de Puebla señaló que su partido deberá trabajar de la mano del Comité Ejecutivo Nacional del PRI: “Eso será parte de lo que estemos trabajando; obviamente, de la mano del partido y del Comité Ejecutivo Nacional”.
Fernández del Campo resaltó la importancia de desempeñarse como legislador: “Ser diputado de oposición es una doble responsabilidad”.
—¿Pocos pero entrones? —se le cuestionó al político priista—.
—Por supuesto —asentó el diputado electo por el principio de representación proporcional—.
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La bancada priista para la siguiente Legislatura estará formada por siete legisladores. Entres los diputados electos del PRI se encuentran: el exdiputado federal y líder de la CTM, Leobardo Soto Martínez; el empresario Pepe Chedraui Budib, quien nunca ha ocupado un puesto de elección popular y quien también llegó al Congreso por la vía plurinominal luego de haber sido uno de los aspirantes a la alcaldía municipal; el exdiputado local y expresidente de la gran comisión del Congreso local, Víctor Manuel Giorgana Jiménez; la exsecretaria general del PRI, Silvia Tanús Osorio, quien también arriba al Congreso por la vía plurinominal; y el diputado electo Rosalío Zanatta.
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El más reciente encontronazo entre el líder del PRI, Pablo Fernández del Campo, y el coordinador de la bancada del tricolor en el Congreso local, Ernesto Leyva, se dio una vez que la bancada priista aprobó el pasado jueves la cuenta pública de Rafael Moreno Valle, correspondiente al año 2012, sin realizarse ningún reparo del gasto efectuado por el titular del Poder Ejecutivo.
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La bancada del PRI en el Congreso local ha contado con tres coordinadores: el exdiputado local José Luis Márquez, el diputado Salomón Escorza, quien perdió en los comicios del 7 de julio la alcaldía de San Martín Texmelucan, y, actualmente, Ernesto Leyva Córdova.
Durante la actual Legislatura, el PRI prácticamente ha avalado todas las iniciativas del gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle. Han aprobado sus cuentas públicas y reformas a la ley como la figura de Proyectos de Prestación de Servicios (PPS).
Los diputados de la bancada del PRI también han aprobado reformas electorales que permitieron la redistritación del estado de Puebla y figuras como las candidaturas comunes, que le permitieron en el pasado proceso electoral a la coalición morenovallista Puebla Unida derrotar al PRI.
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El pasado jueves la dupla legislativa del PRI y el PAN propuso y aprobó el voto de los poblanos en el extranjero, para que en la elección del 2018 puedan votar.
Sin chistar, el pleno también aprobó el dictamen de las cuentas públicas de excandidatos a puestos de elección popular y del gobernador.
El Congreso regresó a la monotonía de la ausencia de disensos. Los diputados aprobaron por unanimidad los puntos planteados en el orden del día: desde las cuentas públicas de diversos personajes de la vida política hasta las reformas constitucionales de corte electoral.
Como espectadores VIP de la “aplanadora” legislativa, los consejeros electorales ensalzaron la aprobación del voto de los poblanos en el extranjero.
A “bocajarro”, los legisladores aprobaron las cuentas públicas de diversos personajes de la administración gubernamental.
En otro sentido, se aprobaron por unanimidad las cuentas públicas del Poder Ejecutivo y del Tribunal Superior de Justicia del estado de Puebla, presentadas por el gobernador Rafael Moreno Valle y el magistrado David López Muñoz, las cuales corresponden al periodo del 1 de enero al 31 de diciembre de 2012.
Además, con 38 votos a favor, el pleno avaló las cuentas públicas del Poder Legislativo, correspondientes al periodo del 1 al 11 de enero del 2012, del diputado Guillermo Aréchiga Santamaría; la del 12 de enero al 29 de marzo de José Luis Márquez Martínez, y la del 30 marzo al 31 de diciembre de 2012, exhibida por el diputado Edgar Jesús Salomón Escorza. Asimismo, la del Órgano de Fiscalización Superior del Estado, que comprende del 1 de enero al 28 de noviembre del 2012, y la de la Auditoría Superior del Estado, para el periodo comprendido del 29 de noviembre al 31 de diciembre del 2012, presentada por el auditor superior David Villanueva Lomelí.
Mientras tanto, por mayoría de votos a favor, los representantes populares aprobaron las cuentas públicas de Blanca María del Socorro Alcalá Ruiz, que comprenden del 1 de enero al 14 de febrero; la de Eduardo Rivera Pérez del 15 de febrero al 31 de diciembre, y de la Universidad Autónoma de Puebla, presentada por Roberto Enrique Agüera Ibáñez, del 1 de enero al 31 de diciembre. Todas correspondientes al año 2011.
Los diputados de las bancadas del PRI y el PAN que durante el proceso electoral habían expuesto sus animadversiones partidistas sepultaron sus desencuentros y volvieron la sesión un “paraíso” de la unanimidad.
Ni los denuestos expresados hace menos de un mes en que se enfrascaron los legisladores del PRI y del PAN ni las pretensiones de transparencia de algunas obras públicas como el CIS les preocuparon de nueva cuenta a los diputados locales.