Cañeros de la zona de Atencingo emplazaron al gobierno de Puebla a cerrar carreteras, hacer una multitudinaria manifestación y hasta tomar la rueda de observación —llamada la Estrella de Puebla—, sino les dan la solución de un subsidio el próximo martes.
A los cañicultores poco miedo les ha dado la amenaza de ir a la cárcel, de parte del subsecretario de Asuntos Políticos de la Secretaría de Gobierno, Luis Arturo Cornejo Alatorre.
En rueda de prensa, ante la crisis y el incumplimiento de promesas de las autoridades de subsidiar mediante una línea de crédito, los campesinos originarios del sur del estado sentenciaron que tendrán que tomar medidas más fuertes.
Incluso, los productores sentenciaron que el gobierno de Rafael Moreno Valle Rosas sí debe tener dinero para apoyarlos con más de 246 millones de pesos de subsidio, sobre todo cuando gastó más de 400 millones en el Parque Lineal, con todo y la Estrella de Puebla.
Sentenciaron que sin el apoyo que pretenden, el mandatario estatal condena a la pobreza a otros 80 mil poblanos, los que se sumarian a la lista de más de 260 mil que reveló el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Para los cañicultores urge un subsidio de 130 pesos por tonelada de vara dulce, para evitar desastre productivo en la entidad, por lo que en su desesperación intensificarán protestas contra el gobierno estatal, en las que contemplan tomar la Estrella de Puebla.
La postura
Las organizaciones de la Confederación Nacional Campesina (CNC) y de Propietarios Rurales (CNPR), que representan a más de 9 mil cañeros poblanos, advirtieron que intensificarán sus protestas para conseguir un subsidio legítimo y realista de 135 pesos por tonelada de caña.
Señalaron que este apoyo les permitirá sobrevivir en la actual zafra 2012-2013, en la que se han perdido 600 millones de pesos que no llegarán a los más de 20 mil hogares que dependen de esta industria.
El dirigente cañero de la CNC, Gabriel Conrado González Cortés, y Miguel Ángel Sosa Guzmán, de la CNPR, advirtieron que, de no conseguir una respuesta positiva este martes, cerrarán carreteras.
También, advirtieron que se valora, a propuesta de los mismos productores en asamblea, la toma de la Estrella de Puebla, en la que el gobernador gastó más de 400 millones de pesos de los contribuyentes.
Por su parte, Maritza Marín Marcelo, presidenta de la CNC en Puebla, alertó que, sin el respaldo a los 80 mil poblanos que dependen de la industria cañera, este mismo número se traducirá en nuevos pobres.
Indicó que los cañeros se sumarán a los más de 261 mil que en la entidad se generaron entre 2010 y 2012, y que colocan a Puebla como la tercera entidad con más habitantes en carestía de todo el país, de acuerdo con el Coneval.
Los dirigentes campesinos lamentaron que, a pesar de que los cañeros poblanos son considerados los productores más eficientes de cualquier rama, el gobierno estatal les niegue el apoyo. Aseguraron que no sólo está en riesgo la producción de la llamada vara dulce, sino toda la industria y economía de la Mixteca poblana.
En este contexto, Gabriel Conrado González Cortés y Miguel Ángel Sosa Guzmán describieron que no han encontrado voluntad en los funcionarios estatales, en las mesas de negociación; al contrario, ha habido amenazas veladas de que podrían ir a parar a la cárcel, si continúan con sus demandas de apoyo.
Los dirigentes de la CNC y la CNPR recordaron que los cañeros de Atencingo son considerados los más eficientes en cualquier rama productiva a nivel nacional, pues, por ejemplo, en el estado de Veracruz, con mejores condiciones climáticas, la cosecha por hectárea de caña es de 80 toneladas, mientras que en la zona de Atencingo alcanza hasta las 120.
Ante este panorama, dijeron que no esperarán más tácticas dilatorias, como las que han utilizado funcionarios de la Secretaría General de Gobierno (SGG) y la Secretaría de Desarrollo Rural y Ordenamiento Territorial (SDROT) del gobierno de Moreno Valle y en esta misma semana, sino hay una respuesta positiva, cerrarán indefinidamente el crucero conocido como Cuatro Caminos, fuera de Izúcar de Matamoros, que conecta esa zona del estado con Morelos, Guerrero y Oaxaca.
La urgencia
Los representantes de los productores reprocharon que el gobierno de Rafael Moreno Valle Rosas realice gastos superfluos, pero sea incapaz de apoyar con alrededor de 246 millones de pesos, 135 pesos por hectárea, a los cañeros y su familias.
Los dirigentes cañeros describieron que el gobierno estatal ha intentado deslindarse del conflicto bajo el argumento de que se trata de un conflicto federal, con el que trata de evadir su responsabilidad en la aplicación de recursos que le corresponden y que incluso define de los programas y las bolsas federales para su ejecución.
Reconocieron que se trata de un problema nacional generado por la apertura de las fronteras a la importación de azúcar y otros edulcorantes —cuando México genera incluso excedentes—, en el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa, pero también reconocieron que la competencia de solución recae en las autoridades del estado encabezadas por Rafael Moreno Valle Rosas.
Informaron que las dirigencias nacionales de sus organizaciones negocian a nivel federal, con las secretarías correspondientes, la solución de fondo al precio del azúcar que de la zafa anterior a la actual cayó de los 805 pesos por tonelada a 509.83, es decir, casi 300 pesos menos, lo que ha generado un boquete en la economía de la región que depende de la producción cañera, calculado entre 500 y 600 millones de pesos.
Crisis y promesas
La situación de la crisis de cañeros se agudiza cada día que pasa sin ninguna solución, lo que mantiene en vilo a más de 11 mil familias en todo el estado, debido a que no han fluido por lo menos 600 millones de pesos tan sólo en Atencingo.
Los ingenios de Atencingo y Calipan perdieron este año más de 482 millones de pesos por la caída en los precios del azúcar, según las primeras estimaciones.
En la zafra 2012–2013 los campesinos recibieron un anticipo de 550 pesos por tonelada, pero el precio de liquidación al cierre de mayo fue de 509 pesos con 83 centavos, por lo que cada productor adeuda al ingenio 40.17 pesos por cada tonelada cosechada.
Según Conrado González Cortés, afirmó que el pago fijado en 509 pesos es 36 por ciento es inferior al que se acordó en la zafra pasada, de 805 pesos.
Esta situación que prevalece en el sector no sólo afecta a toda la cadena productiva de este cultivo, cuyo precio de garantía bajó hasta en 40 por ciento, también afecta a todo el sector comercial de las regiones de Izúcar de Matamoros y Chietla, en su conjunto.
González Cortés, dijo que la gente no tiene liquidez para hacer sus compras, principalmente ahora que se avecina el periodo educativo.
El ciclo cañero oficialmente concluirá el 31 de septiembre y previeron ambos representantes que el precio podría ir aún más a la baja, cuando en la actualidad ha disminuido en 40 por ciento y de ser aprobado este presupuesto, estabilizará en parte el precio que desde enero de 2013 ha ido a la baja.
En tanto, Miguel Ángel Sosa Guzmán llamó a todos los sectores de la sociedad para que se solidaricen con el sector cañero que atraviesa por una condición crítica que repercute en el comercio, en el transporte público y todo lo que depende de esta actividad.
“El ingenio de Atencingo, es uno de los más productivos del país, con los mejores rendimientos pero hoy la crisis le ha pegado a todo el sector desde trabajadores hasta los productores cañeros, que pedimos un subsidio de 135 pesos por tonelada de caña para estabilizar el precio de garantía cuando la pérdida es de 300 pesos”, indicó Sosa Guzmán.
Informó que el monto de la liquidación final es de aproximadamente 120 millones de pesos que a la fecha no han sido pagados por Feesa lo que significa que los ingenios están prácticamente en la quiebra al no haber fluidez económica.
Roberto Lara Suárez, secretario general de la CNPR de Atencingo, explicó que durante la zafra 2012-2013, el anticipo a cuenta de pago por tonelada de caña fue mayor al pago de liquidación y este último, representa la ganancia.
Pero este año trae como consecuencia que los productores de caña no pueda cubrir las obligaciones financieras contraídas y caigan en el buró de crédito que los inhabilita para acceder a un crédito para la próxima zafra 2013-2014.
Mencionaron que entre los factores que propiciaron la disminución del costo del azúcar es la importación de Centroamérica y Estados Unidos, además que se tuvo una sobreproducción en México.
Sosa Guzmán dijo con ello miles de familias sufren las consecuencias de la crisis que se vive en los campos de los municipios cañeros de Izúcar de Matamoros, Chietla, Tepeojuma, Atzala, Tilapa, San Martín Totoltepec, Epatlán, Chiautla de Tapia, entre otros.
“Los productores preveíamos que cayera el precio del azúcar, pero no tanto, lo cual fue ocasionado por la importación del producto que autorizó el gobierno de Felipe Calderón en 2011 y 2012, aunado a la sobreproducción nacional”, acotó.
El país consume 4 millones 300 mil toneladas de azúcar al año y se produjeron más de 5 millones de toneladas en lazafra del 2011-2012, mientras que en la temporada que concluyó se elevó a 7 millones de toneladas, esos excedentes se tenían que exportar pero las políticas públicas del gobierno federal ocasionó la saturación del mercado.
Detallaron que si no encuentran respuesta con la autoridad estatal, buscarán al gobierno federal para que les otorgue apoyos.