Habitantes de la Sierra Norte denunciaron que, además del proyecto Espejeras —de Carlos Slim—, hay otras empresas dedicadas a la minería que están causando daño al medio ambiente, mismas que amenazan o intentan “comprar” a la gente para que no los molesten.
En conferencia de prensa, autoridades comunitarias y habitantes del municipio de Ixtacamaxtitlán exigieron al Gobierno Federal, estatal y municipal frenar la instalación de las empresas mineras Gavilán y Cerro Grousse, por los daños que al medio ambiente y a la salud de los pobladores esta generando sus trabajos exploración.
Expresaron que la empresa Minera Gavilán se ha dedicado a hacer “donaciones” directamente y por medio del DIF, para tratar de convencernos de que siga operando en nuestras comunidades: “Esta intención es con el claro objetivo de dividirnos, para crear un conflicto comunitario y justificar una intervención policiaca o militar, como ellos mismos lo han afirmado.
”Nuestra preocupación y rechazo a la exploración minera ha crecido, ya que se ha empezado a presentar escasez de agua en algunos manantiales. Estamos ciertos que con las más de 336 perforaciones que han hecho, a más de 400 metros de profundidad, se está modificando el curso de las corrientes de agua subterráneas”.
Señalaron que las autoridades comunitarias han exigido al presidente municipal Erik Gorozpe Treviño que informe sobre las actividades de la minera y que no de ningún permiso a la misma sin consultar a las comunidades, ante lo cual ha dicho que él no tiene información y que ellos no son quién para estar convocando a asambleas, cuando su deber es garantizar los derechos del pueblo que lo eligió.
Los representantes de estas comunidades dieron a conocer los abusos de los que han sido objeto por parte de los ingenieros de estas empresas transnacionales, como el ingreso sin los permisos a predios particulares para detectar minerales.
Asimismo, al cuestionar las supuestas bondades que traerá consigo el proyectil minero para los pobladores, son humillados y retirados del lugar con lujo de violencia.
Expresaron estar cansados de la prepotencia de los trabajadores de las mineras, por lo que advirtieron que de continuar los trabajos la población se opondrá e impedirá por la fuerza que sigan adelante.
En este sentido, responsabilizaron a las autoridades de los tres órdenes de gobierno de la integridad física y psicológica de los habitantes del municipio de Ixtacamaxtitlán.
Los pobladores hicieron un llamado a las organizaciones populares, políticas y de derechos humanos a estar atentos al desarrollo de los acontecimientos, ante la imposición de este proyecto minero.
