El olor fecal del drenaje al descubierto preocupa a los habitantes de la calle La Luz, a la altura de la avenida Guerrero, en la junta auxiliar Romero Vargas.

El pedazo de una cinta amarilla, señal de peligro, está tirado en la calle sin pavimentar.

Ni las autoridades de la junta auxiliar Romero Vargas ni el SOAPAP han intervenido para solucionar el desperfecto que amenaza con volverse un problema de salud pública, debido a que el drenaje se encuentra al aire libre en un área de 300 metros.

El drenaje corre desde el principio de la calle La Luz, a unos 400 metros del desperfecto en la parte alta de la calle, pasando por varias casas en la parte alta de esa sección de la Romero Vargas y desemboca en el río Atoyac.

Cientos de litros de agua de drenaje corren libremente sin que las autoridades solucionen el problema que puede generar afecciones a la salud.

El drenaje al aire libre sigue su cauce con un hedor insoportable sobre toda la calle La Luz.

Aunque hay pocas casas habitadas alrededor del drenaje a la intemperie, casi al final de la calle, las personas con las que Intolerancia platicó señalaron que el hedor les molesta la garganta, por “picoso”, y se muestran preocupados por su salud, en especial porque cuando llueve las aguas del drenaje se mezclan con las de la lluvia haciendo más grande el “cauce” del drenaje .

Desde hace alrededor de dos meses se rompió el registro del drenaje  de la última parte de la calle, mitad pavimentada, mitad sin pavimentar.

No hay ninguna obra de restauración del drenaje y los vecinos se quejan de que ni las autoridades de la junta auxiliar ni el SOAPAP han atendido el desperfecto.

El drenaje se rompió a mitad de la calle La Luz. El agua proveniente de los caños recorre una distancia de unos cien metros, hasta desembocar en el río Atoyac.

Hace algunas semanas un camión de basura cayó en el drenaje abierto, prácticamente encallando en la cañería abierta a ras de tierra.

Entre los vecinos y el conductor del camión de basura intentaron sacar el camión. Además, tuvieron que cargar la basura del camión.
La calle La Luz no está pavimentada completamente. Unos 200 metros antes de terminar, la calle ya no está pavimentada.

Desde hace dos meses el drenaje de la calle La Luz está roto.
“La presidenta de acá arriba, nada más vino a ver y no ofrece ella ninguna solución.

”Como es agua de drenaje pues nos afecta”, señala uno de los habitantes de la calle con el que conversamos brevemente.

A unos cuantos metros del drenaje abierto pastan algunos borregos.

La calle se encuentra solitaria. No hay tiendas tampoco personas que transiten por ella.  

A la vuelta de la calle La Luz, sobre la calle Guerrero, otros vecinos cuentan que desde hace dos meses se averió el drenaje y aunque no transitan sobre la calle cerrada señalan que es molesto el olor a caño que llega hasta sus casas, a unos 100 metros del cauce de agua de drenaje.