Al asegurar que el estado de Puebla vive la situación de inseguridad más complicada de su historia reciente, el analista político de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla Alejandro Guillén Reyes afirmó que existen diferentes razones para reforzar esa percepción social, sobre todo que los programas de combate a la pobreza y de generación de empleo no dan los resultados esperados: “En la medida en que no se abata el tema del desempleo, que no se disminuyan los índices de marginación y desempleo seguiremos teniendo casos que se traducen en un aumento de delitos del fuero común, eso es lo complicado”.

Sobre el tema de la inseguridad, las autoridades no pueden deslindarse de sus responsabilidades y no pueden echarse la culpa entre los diferentes órdenes de gobierno, dijo el investigador de esa casa de estudios poblana porque de hacerlo así se convierte en un cuento de nunca acabar, por eso puntualizó en que se requieren políticas públicas efectivas para frenar los crecientes delitos del fuero común.

Guillén Reyes aclaró que si esas políticas se implementan, los resultados no son los mejores porque no tiene duda que haya una serie de programas y de planes, pero lo cierto es que el estado de Puebla no sale de los últimos lugares en pobreza ni de los primeros en delitos del fuero común: “Yo no dudo que hayan proyectos que se han venido instrumentando, pero no han dado los resultados, los gobiernos funcionan en base a resultados, más allá de las declaraciones en medios de comunicación los gobiernos se miden por resultados y hasta el momento los temas de los delitos del fuero común van en aumento y (ahí) están las cifras”.

Aunque no puede asegurar que se toman las medidas exactas para combatir ese tipo de delitos, porque hay diversas formas de abordar esos problemas, Guillén Reyes dijo que más allá de la buena voluntad los resultados en Puebla no son satisfactorios. “Es ahí en donde tenemos que ir poniendo el dedo en la llaga, en los resultados”, por eso afirmó que un elemento que es fundamental, independientemente de un servicio de inteligencia y de estrategia, es que estén coordinados las distintas instancias, federales, estatales y municipales: “Con el fin de establecer una serie de acciones que hagan de Puebla un lugar para que no encuentren aquí cobijo alguno personajes como el que fue capturado la semana pasada”.

Por eso, desde su perspectiva, aunque fue notorio el trabajo de la Marina en la captura de un capo mexicano en territorio poblano, lo importante es la coordinación entre las diferentes instancias para dar golpes importantes: “Creo que más allá de la estrategia, lo importante es la coordinación entre órdenes de gobierno, aunque no es ‘foco rojo’ afortunadamente, ojalá no lo seamos, no desde mi percepción, en los delitos de orden federal no estamos en una situación tan grave como en otros estados si se compara Puebla con otras entidades, no está en condiciones como Michoacán, Nuevo León o Chihuahua, pero eso es con respecto a los delitos de orden federal”.

En ese contexto, el analista político aseguró que en el rubro en el que se tienen que encender las “alertas amarillas” es en los delitos del fuero común, pero que comiencen a verse resultados inmediatos, porque cada vez sale a colación algún problema relacionado con un asalto o un robo, y eso se percibe en incremento en el estado de Puebla: “El tema fundamental en que se tienen que prender ‘focos amarillos’ es el de la inseguridad y los delitos del fuero común, que en los últimos años ha ido creciendo”.

Alejandro Guillén Reyes dijo que más allá del tipo de delito, si son de orden federal o del fuero común, el agravio a los ciudadanos tiene el mismo impacto porque genera desequilibrios en términos psicológicos y de convivencia cotidiana: “Se tienen que encender los ‘focos rojos’ y lamentablemente tienen que ocurrir casos muy escandalosos, en que las autoridades tratan de ver qué acciones tomar, urgen acciones concretas para la inseguridad por delitos el fuero común”.

Para frenar esa problemática social, dijo Alejandro Guillén, el trabajo del Poder Legislativo debe ser fuerte, porque está claro que los delitos son crecientes y están las cifras del consejo federal de seguridad: “Puebla está en una situación por lo menos delicada”.