Mientras la línea dos de la Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA) anunció que aún no hay fecha para iniciar cobros, vecinos de la colonia Agua Santa exigieron que el costo sea de seis pesos, como los demás transportes.
En rueda de prensa, señalaron que hay rumores entre los mismos trabajadores de la nueva línea, de que el costo del pasaje en la troncal será de por lo menos 10 pesos.
Por lo tanto, ante el pésimo servicio que está prestando RUTA, con unidades insuficientes para las miles de personas, exigieron que sea subsidiado por el gobierno de Rafael Moreno Valle.
Jorge Sosa Pérez, representante del Consejo Ciudadano, señaló que a casi dos meses de que entró en operación la línea 2 del ruta, los vecinos de la zona sur del estado demandaron la construcción de un puente peatonal a la altura de la 117 Poniente, porque es un peligro pasar para tomar el transporte. Indicó que es necesario que se construya la estructura, porque se corre el riesgo de que ocurran accidentes con los peatones.
Subrayó, que una vez que termine el periodo gratuito del servicio, el cobro al transporte de RUTA debe ser de 6 pesos, porque el gasto puede llegar hasta los 12 pesos, para quienes tienen que tomar hasta dos alimentadoras para llegar al paradero.
“Nos preocupa esta situación, la economía de las familias poblanas cada día es menos favorable, son personas que ganan el salario mínimo, y se incrementan sus gastos cuando tienen más de tres hijos”, comentó.
A las autoridades estatales y municipales, les solicitaron mayor vigilancia de elementos de tránsito, porque a diario se registran percances por el cambio y adaptaciones de la vialidad en el paso al periférico y la 11 Norte-Sur.
La semana pasada, vecinos del sur de la ciudad retomaron las protestas en contra de la línea 2 del metrobús, el cual corre por la 11 Norte-Sur, al marchar desde la terminal Margaritas hasta el Periférico Ecológico, donde hicieron un plantón.
“En este lugar llegó un comandante de la Policía Estatal a amenazar que si no se suspendía la protesta, seriamos reprimidos”, dijo en rueda de prensa una de las habitantes de Agua Santa.
Los vecinos del sur tomaron la vialidad, lo que generó un caso total, porque los habitantes de la zona no tuvieron otra opción para trasladarse a sus centros de trabajo o a realizar sus actividades cotidianas.
El gobierno del estado decidió suspender el servicio en ambos sentidos, con la finalidad, dijeron algunos inconformes con el metrobús, de que los usuarios afectados “se enojaran con los manifestantes”.
Durante la manifestación, un representante de la Secretaría General de Gobierno, que se mantuvo en el anonimato, intentó convencer a los inconformes de terminar la protesta y liberar la 11 Sur, pero no abrió la posibilidad para entablar el diálogo con las autoridades.
El representante de la SGG les dijo que él no podía hacer nada, refirió uno de los manifestantes.
—¿Qué les dijo?
—Que nos quitemos y se abran las calles porque esto (la manifestación sobre el carril confinado) es un delito, pero no entienden que esta es la única forma en que nos hacen caso.
La inconformidad es creciente por el cobro del servicio, el cual será de 7.50 pesos por viaje en troncal, 6 pesos por alimentadora y además de 12.50 pesos para la adquisición de una tarjeta plástica obligatoria para recargar saldo y utilizar el Metrobús.
Los vecinos coincidieron en que antes de la entrada del metrobús se iban a trabajar con 6 pesos y regresaban con lo mismo, pero ahora invertirán el doble de los recursos “para un transporte ineficiente, mal planeado y caro”.