Con más de 20 nuevas leyes para criminalizar la protesta y el triple de agresiones a periodistas, el entorno de la represión en México y Puebla se ha agudizado en los últimos años.
Así coincidieron en señalar especialistas en derechos humanos y comunicadores en el foro Retos de la Libertad de Expresión en Gobiernos Autoritarios, realizado por la Red de Periodistas de Puebla y la Universidad Iberoamericana.
Tan solo el año pasado, alertaron que las agresiones contra periodistas se triplicaron de acuerdo con información de Article 19.
En la mesa de análisis participaron académicos de la Universidad Iberoamericana, Article 19, Frente por la Libertad de Expresión y la Protesta Social, el equipo de investigaciones de Carmen Aristegui, Comunicación e Información de la Mujer A.C. y la Red Puebla de Periodistas.
Al respecto, el abogado del Programa Legal de la organización internacional en defensa de la libertad de expresión, Leopoldo Maldonado Gutiérrez, señaló que la intolerancia del gobernador Rafael Moreno Valle Rosas a la crítica y a su indiferencia frente a los problemas sociales, ha generado la represión.
Además puso en alerta que no sólo se encuentran a la alza los ataques contra la prensa, sino que en Puebla ha avanzado un nivel más en la escala de criminalización de la protesta social, lo que ya es muy conocido en todo el país y hasta de manera internacional.
Señaló que en el tema de la llamada ley Bala fue un descaro presentarla ya que preveía el uso de la fuerza letal en manifestaciones, a” mí me parece que nos dice muchas cosas”, dijo.
Además vinculó el aumento en los ataques a los trabajadores de los medios informativos a la crisis de imagen que enfrentó Moreno Valle en 2014 por el asesinato del niño José Luis Tlehuatle Tamayo, en la represión a manifestantes de Chalchihuapan.
“No sólo se agrede a quien trata de actuar como un contrapeso, también se agrede a quien documenta e informa”, agregó el especialista en la defensa de la libertad de expresión.
Por su parte Lilia Vélez Iglesias, coordinadora de la Carrera de Comunicación de la Universidad Iberoamericana, coincidió al señalar que Moreno Valle “trae lo peor de dos mundos”, por tener una formación autoritaria y pertenecer a una clase acomodada.
Además se informó reveló que desde el 2012 a la fecha se han presentado en el país 20 iniciativas de ley para criminalizar la protesta social, que incluyen cláusulas para regular las marchas y sobre el uso de la fuerza pública
En su intervención, Irving Huerta, del equipo de Carmen Aristegui, señaló que la relación entre el poder y los dueños de los medios de comunicación ya se encuentra dañada, lo cual obliga a cambiar la interacción con las audiencias.
Por lo tanto consideró que se debe tener una libertad de prensa amplia, la cual no sea castigada con asesinatos o encarcelamiento.
Además señaló que ante la represión de los gobiernos autoritarios a los periodistas es no callar, profesionalizarse y generar alianzas con otros medios de comunicación.
, aseguró Irving Huerta, del equipo de investigaciones de Carmen Aristegui.
Señaló que a pesar de las presiones que puedan ser blanco los periodistas, no es una opción callarse porque en ese momento dejan de ser visibles.
Dio por ejemplo que el caso afamado del el reportaje de la Casa Blanca, se compartió con Proceso, Reforma y La Jornada para que la información pudiera salir al aire en MVS noticias.
En el mismo se fio conocer la mansión de 7 millones de dólares del Presidente de México, Enrique Peña Nieto en la colonia Lomas de Chapultepec, construida por Grupo Higa, uno de los principales contratistas del mandatario.
Por lo tanto destacó la importancia de generar alianzas informativas y trabajo entre medios de comunicación, pero también con organizaciones civiles y académicos.
Por su parte Simón Hernández, del Frente por la Libertad de Expresión y la Protesta Social, expuso durante su intervención que es necesario democratizar al Estado y al país para poder ejercer de manera plena la libertad de expresión.
Esto debido a que la asignación de publicidad gubernamental muchas veces se presta a corruptelas, pero también la democratización debe de venir de la propia población, para que exija su derecho a información de calidad.
En ese mismo sentido se manifestó Juan Luis Hernández, académico de la Ibero Puebla, quien como conclusión dijo que la democracia no llegará de los cotos de poder, sino de la participación y unión de los diferentes sectores de la sociedad a pesar del miedo y de la propia represión.
