Rafael Moreno Valle en su quinto informe de gobierno intentó ser el centro de atracción política.

Pero la inercia de la sucesión de Casa Puebla para la minigubernatura; la arquitectura paisajística del Pritzker japonés, Toyo Ito; los remedos de Soap Show en el discurso narrativo de su informe; las cifras protagonistas de su propio desfile de progreso y vanagloria; y las protestas ad hoc de burócratas encabezadas por el hiper-tuitero, Gerardo Fernández Noroña, atravesaron sus deseos de ser el único protagonista de su informe.

Al inicio de su discurso el gobernador de Puebla batalló contra los fantasmas del 2018: las líneas primerizas de su oratoria fueron lanzadas en contra de Andrés Manuel López Obrador, a quien no citó por su nombre pero sí por sus intensas críticas.

En una suerte de mensaje político, el político surgido de una coalición multipartidista, afirmó que es más fácil denostar que construir un gobierno.

“No es lo mismo denostar a las instituciones que construir un buen gobierno”, dijo el gobernador en sus primeras frases de su informe, mensaje derivado de su disputa en twitter, días antes del informe, con el líder izquierdista, Andrés Manuel López Obrador.

Fuera de ese lapsus de futurismo, Moreno Valle se ajustó a las formas de la política, saludó a la secretaria de la SEDATU, Rosario Robles Berlanga. El político agradeció también al gobierno de Enrique Peña Nieto y señaló en varias ocasiones, como cuando habló del combate a la pobreza, que su gobierno ha realizado acciones coordinadas con el gobierno de la república y los municipios.

En la transmisión del informe prácticamente todas las tomas fueron para el gobernador como personaje central de la narrativa política local. Sin embargo, en el entorno político, la sucesión de Casa Puebla por la minigubernatura rondaba en el ambiente.

Entre los aliados del gobernador Moreno Valle apareció el exdirigente del PRD, Jesús Zambrano, promotor de la coalición PAN-PRD para el 2018 y el líder nacional del PAN, Ricardo Anaya. Gobernadores de gobiernos de coalición, como Gabino Cué Monteagudo del estado de Oaxaca, y el jefe de gobierno del Distrito Federal, Miguel Mancera, también aparecieron en el informe. Al estrellato político también se le suma la presencia de Jaime Rodríguez, el Bronco, gobernador del estado de Nuevo León.

A diferencia de los otros gobernadores, El Bronco, arribó en vuelo comercial al aeropuerto de Huejotzingo.

Los reflectores desenfocan a Moreno Valle

Por segundo día consecutivo, la senadora de la república, Blanca Alcalá Ruiz atrapó los reflectores. La senadora priista apareció acompañada de la secretaria de la Sedatu, Rosario Robles Berlanga, delegados del gobierno federal y diputados federales.  

La secretaria y la senadora tomaron se trasladaron en un autobús sin lujos hacia la sede del informe en compañía de los delegados del gobierno federal en Puebla. Robles y Alcalá platicaron durante el trayecto sentadas en los primeros asientos del vehículo. Atrás de la senadora iba su hija Karina, regidora del ayuntamiento de la ciudad de Puebla.

Las invitadas no ingresaron a la carpa del informe a través del acceso VIP sino que eligieron otra puerta desde donde pudieron saludar a algunos asistentes y placearse cómodamente por el lugar.

A la secretaria de la Sedatu y a la senadora de la república, Blanca Alcalá Ruiz, también las acompañaba el delegado de la Sagarpa, Alberto Jiménez Merino, aspirante a la gubernatura.

 


 

A la llegada del “equipo” de Peña Nieto también se sumaron los diputados federales del PRI y el secretario de gobierno, Diódoro Carrasco Altamirano, expriista y exgobernador de Oaxaca.

Pero mientras en el interior del recinto se placeaban los políticos, a las afueras del lugar, el exdiputado de izquierda, Gerardo Fernández Noroña se daba tiempo para tomarse selfies con trabajadores del gobierno de Puebla despedidos quienes hicieron una protesta a unos metros de la obra de Toyo Ito.  

El museo Barroco, diseñado por el Premio Pritzke, Toyo Ito, lucía aún inconcluso. Los trabajadores de jardinería colocaban aún secciones de pasto minutos antes de que pasaran sobre una alfombra verde los invitados VIP de la clase política y empresarial al informe del gobernador de Puebla.

Decenas de trabajadores regaban el pasto o limpiaban un camino de cemento que había sido colado unas horas atrás, por la mañana, antes de la aparición de la clase política.

“Tanto desmadre para dos horas”, se quejaba un trabajador al término del informe.