A pesar de que el gobierno del estado firmó un convenio con la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA), este no se ha puesto en marcha, es decir, que las instancias federales no han entregado protocolos a la entidad para que se actúe, esto ante la permanencia de venta de gas robado reveló el gobernador de Puebla.
El mandatario local reconoció que continúa la venta y distribución de gas robado en la entidad, por ello, el gobierno estatal realiza acciones permanentes de vigilancia.
Por medio de operativos las pipas son supervisadas por la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) para que comprueben la legalidad del hidrocarburo.
“Mucho del gas que se distribuye es gas robado, es la realidad, tenemos un permanente operativo para revisar todas las pipas que circulan y que se pueda observar la legalidad del producto que llevan, pero si es un riesgo, después hay un asunto que no existía en otro tiempo que ya las compañías de gas, las distribuidoras de gas, las formales, las instaladas, ya no distribuyen el gas, ya no hacen intermediarios y con eso se desligan de esa responsabilidad de tener cilindros y pipas en buen estado”, comentó.
El mandatario local comentó que el asunto es complejo, sin embargo, expuso que es necesario que se emitan los protocolos de acción por parte del gobierno federal, pues el estado realiza operativos de vigilancia, pero las acciones están limitadas, pues el tema es delito federal.
“Es un asunto complejo, pero nosotros tenemos un operativo permanente, nosotros estamos esperando que ya nos puedan darnos los elementos (…) necesitamos ya los protocolos para poder intervenir, no es posible, pues, ese tipo deformas de actuar no, en Puebla no”, comento.
Desde el año pasado, tras la explosión ocurrida en San Pablo Xochimehuacan, el gobierno del estado inició por medio de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) operativos permanentes para detectar pipas de gas lp, a las que se les revisa que el hidrocarburo sea legal.
Familias optan por llenar tanques con pipas
Ante el alza constante de gas lp, muchas familias poblanas han optado por rellenar sus cilindros de gas, por ejemplo, un tanque de 20 kilos que cuesta más de 400 pesos piden a las pipas que lo rellenen solo con 200 pesos y de esta forma tener el hidrocarburo para sus actividades.
Sin embargo, esta acción además de ser ilegal, resulta peligrosa, ya que las pipas no ofrecen la seguridad a los consumidores, ante posibles fugas que pueden provocar explosiones mayores.
Esta práctica de rellenado de tanques de gas, ya se esta observando de forma común, no solo en Juntas Auxiliares de Puebla, sino en varios municipios de la zona metropolitana, por lo que el gobierno del estado continúa con operativos para detectar a las pipas que cometen este delito.
Las recomendaciones de las autoridades estatales es que las familias consuman gas con distribuidores autorizados y de esta forma evitar accidentes que pueden costar la vida de muchas personas.