La diputada por el Partido del Trabajo (PT), Miriam Ávila Peralta hizo un llamado a los 217 ayuntamientos para que  tomen acciones y hagan cumplir los reglamentos para que respetar el derecho de los ciudadanos a descansar, y no ser molestados por el ruido que generan sus vecinos.

Ávila Peralta pidió que se fortalezcan las acciones y medidas en contra de vecinos que generan exceso de ruido y en horarios no prudentes, para que se respete la paz y la tranquilidad de poblanos y poblanas que por necesidad o por salud deben descansar.

Precisó que el ruido excesivo es una forma de contaminación que puede tener serias repercusiones en la salud física y mental de las personas, y estudios han demostrado que la exposición prolongada a niveles elevados de ruido puede causar estrés, problemas de sueño, hipertensión y afectaciones en la capacidad de concentración y rendimiento académico y laboral.

“La exposición constante al ruido excesivo puede desencadenar problemas de salud como insomnio, ansiedad, y enfermedades cardiovasculares. La interrupción del descanso nocturno afecta negativamente el bienestar general y la productividad de los individuos”.

Señaló que el ruido excesivo genera conflictos entre vecinos, deteriorando la cohesión social y la calidad de vida en las comunidades. La falta de respeto hacia los horarios de descanso crea un ambiente de tensión y resentimiento.

Advirtió qué aunque existen reglamentos que establecen límites de ruido y horarios para actividades ruidosas, la implementación y vigilancia de estas normativas han sido insuficientes.

Insistió en que es crucial fortalecer los mecanismos de control y sanción para garantizar el cumplimiento de estas leyes, además de  incrementar los recursos destinados a la vigilancia del cumplimiento de las normativas de ruido.

Expresó que se puede incluir la implementación de patrullas vecinales y el uso de tecnología para monitorear los niveles de ruido en áreas problemáticas.

Finalmente señaló que es fundamental realizar campañas de concienciación dirigidas a la ciudadanía para educar sobre los efectos negativos del ruido excesivo y promover la convivencia respetuosa. “Estas campañas deben resaltar la importancia de respetar los horarios de descanso y el derecho al silencio”.