La perspectiva sobre la tragedia del pasado viernes, en donde falleció el secretario de Gobernación Francisco Blake, en el extranjero no es nada alentadora.
La visión internacional sobre la muerte de Blake y las siete personas que lo acompañaron la vinculan con un atentado en contra del segundo funcionario en importancia dentro del gabinete federal.
La violencia que se vive en nuestro país es de lo que poco que se destaca del otro lado del mundo y por eso para la mayoría de los analistas, el desplome del helicóptero en el que viajaba el secretario de Gobernación Blake Mora obedece desde esta óptica, a la lucha que sostiene el gobierno federal contra el narcotráfico.
No es irresponsable abordar este tema desde la óptica que se tiene fuera de México, es simplemente comentar cómo se ven las cosas desde un país en donde la violencia es cosa cotidiana y en donde, no obstante, hay consternación por lo que ocurre en México, en donde la guerra contra el narcotráfico ya ha dejado más de 50 mil víctimas.
En Israel como en Europa y otras partes del mundo, sólo se habla de las muertes que día a día se acumulan en México y como el país cambió diametralmente en cuestión de sólo unos años, ya que antes era muy difícil que se hablara de nuestro país en el Medio Oriente, pero hoy por desgracia se habla, pero sólo en el aspecto negativo de la inseguridad, los decapitados y las balaceras.
Tal vez sea imposible determinar las causas reales de la muerte de Blake Mora, pero sin duda desde fuera se cree que fue víctima de un atentado, esa es la imagen que a nivel internacional hoy se tiene por desgracia, insisto, de nuestro país.
Michoacán, la puerta a la inestabilidad
El peor escenario que se podría presentar ocurrió en Michoacán ayer, donde las tres principales fuerzas políticas del país se declararon triunfadoras, luego de haberse cerrado las casillas.
Ahora al clima de inseguridad que priva en ese estado se sumará también el de la ingobernabilidad y es que es un hecho que la elección se definirá en los tribunales y a nadie le quedará la certeza de que el triunfo obtenido sea legítimo.
Es muy seguro que si la elección se va a los tribunales, el triunfo le corresponderá a la hermana del presidente de la República, Luisa María Calderón Hinojosa, la tal “Cocoa”.
Mucho se hablará en los próximos días de la elección en Michoacán, la cual siendo justos se debería de anular por la cantidad de irregularidades que se cometieron durante todo el proceso y la cantidad de recursos que se invirtieron para apuntalar a la candidata de Acción Nacional y hermana del presidente de la República.
Lo que sí es un hecho es que paradójicamente, al parecer México en vez de avanzar hacia la democracia, parece entrar en un retroceso en donde cínicamente el aparato gubernamental opera de manera libre para favorecer a los delfines en turno.
La democracia es hoy un tema pendiente en la agenda política de México, la tentación de los gobiernos autoritarios cada vez se hace más presente ante la pasividad de los ciudadanos, que están hoy más preocupados por la inseguridad y el desempleo que en política.
Michoacán es el preámbulo de lo que puede ocurrir en México en el 2012, en donde la operación de una elección de estado es una tentación permanente a la cual se tendrá que enfrentar el casi seguro candidato del PRI a la Presidencia de la República y favorito de la contienda, Enrique Peña Nieto.
El caso Blake visto desde fuera
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