La administración estatal está próxima a cumplir un año de administración y no es gratuito que tenga sus años buenos y sus no tan buenos.
A un año de administración el saldo es más positivo que negativo y es que dentro de la gestión morenovallista hay cosas positivas, pero también negativas, es decir, hay un vaso medio vacío, pero también lo hay medio lleno.
Lo mejor de la administración estatal —y aunque tal vez no le guste al gobernador, acostumbrado a oír lo que le gusta— está en lo hecho por su cuñado, el secretario general de Gobierno Fernando Manzanilla Prieto, un hombre bien intencionado y que busca tender puentes con todos, sabedor de que el 4 de julio de 2010 va a cumplir dos años y ya quedó atrás desde hace mucho tiempo.
Después del secretario general del Gobierno hay muchos nombres que tal vez hasta sean mal vistos dentro de la administración estatal, pero que sus resultados están a los ojos de todos.
La lista la encabeza el mejor secretario dentro de la actual administración, su nombre es Luis Maldonado Venegas, titular de la SEP y quien ha puesto el ejemplo de qué es trabajar en un esquema de transición.
Siempre entregado y dispuesto a dar lo mejor, el veracruzano Maldonado ha demostrado que está dispuesto a dar lo mejor que tiene en beneficio de la entidad de la cual no es originario. Su equipó suple cualquier deficiencia que pudiera tener el hombre que además es amigo de los políticos más encumbrados de este país.
Otro que ha cumplido con su trabajo y dando lo mejor para el proyecto político del gobernador Rafael Moreno Valle es el secretario de Salud, Jorge Aguilar Chedraui.
Medio hosco, alejado de los reflectores y comprometido con el proyecto del gobernador, Jorge es hoy por hoy garantía de trabajo. Sus resultados están a la vista de todos y sin duda el mensaje que dirija el gobernador Moreno Valle así lo ha de reflejar.
Otra pieza de lujo y hasta a veces subestimada es el secretario de Infraestructura, José Antonio Gali Fayad; Tony Gali no conoce otro camino más que el de los resultados.
Sabedor de que no hay otra forma de llenarle la pupila al llamado gobernador “sol”, por eso de que el estado soy yo, Tony Gali trabaja para entregar resultados.
Temeroso y prudente, Gali sabe que no luce su trabajo pero ahí está y que le ha costado mucho, pero mucho, cumplir con la encomienda que le han encargado.
Una mención aparte le merece el verdadero secretario sin cartera, Eukid Castañón Herrera, quien es el verdadero operador morenovallista.
Su trabajo no luce, no está a la vista de la opinión pública, pero sin duda es de los que más resultados da.
Castañón es un auténtico relevista, un cerrador de lujo, el que se encarga de que caiga el out 27, ese es su sello y así lo ha entendido.
Lo que también sobresale es la ausencia total de una política de Comunicación Social que le permita al equipo del “gobernador sol” salir.
Para su modo de ver las cosas, solo él debe de sobresalir, pero le niega los méritos a una buena parte de sus colaboradores, que se mueren por emularlo y en muchos de los casos dan hasta su salud por seguir los pasos de quien dicen será el mejor gobernador en la historia de Puebla.
¿Usted les cree?