Otros 30 elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE), entre los que se encuentran policías del estado, bomberos, policías viales y custodios causaron baja, por la misma razón que los otros 400 que reprobaron un supuesto "examen de confianza".
Los nuevos despedidos fueron citados a las instalaciones de la Academia de Policía, les dijeron que ya no eran aptos para ser policías y les entregaron su anuncio de baja, ni siquiera una copia del examen que dicen que reprobaron ni la aclaración de lo que no les fue aceptado, simplemente los mandaron a la calle.
En la misma academia se dijo que la nueva lista de despedidos era de 100 y que ahora iban a utilizar la "estrategia", no les iban a decir a todos de un sólo golpe, iba a ser por pausas, para evitar lo ocurrido cuando 400 fueron notificados que ya no iban a trabar más en la secretaria.
Listas, amañadas
Algunos policías fueron testigos de la llegada de la lista de despedidos, dicen que ésta fue analizada por sus superiores; el inspector Palma, el comandante Oscar López y el jefe de operaciones, Estrada, que vieron los nombres de los despedidos, borraron a los que eran sus "cuates" y pusieron los nombres de quienes les caían mal, para así darles la noticia.
Este rumor mantiene indignación dentro de las filas de policía, sobre todo porque les han dicho que van a haber más despedidos y ellos creen que lo del examen de confianza es sólo un pretexto para sacarlos de su trabajo, porque nunca se los han mostrado, sólo les enseñan un oficio donde aparece su nombre como dados de baja.
Ellos sabes que personajes como el comandante Oscar López, uno de sus jefes inmediatos, les dijeron que también reprobaron este examen y que se mantienen trabajando por un presunto amparo, mientras que a otros ya les dieron sus cheques de despedida. Les dijeron que sus tarjetas de Banorte, con las que cobraban sus quincenas, quedaron inservibles.
Los policías piensan que las listas están amañadas, pero en lugar de hacerles caso los mantienen encerrados en la academia, de las 8 a las 15 horas, sin dejarlos salir y con la pura intención de neutralizar cualquier tipo de protesta de estos abusos, que consideran son privación ilegal de la libertad; responsabilizan al comandante Gómez, quien es el encargado de la Academia de Policía.
¿Levantón a periodista?
De acuerdo a la averiguación previa 1282/2014, radicada en la Delegación del Ministerio Público de Teziutlán, sujetos por el momento desconocidos "levantaron" a Miguel Ortega Bonilla, conductor del noticiario de esa zona, Rex y Comunicación.
Los desconocidos lo interceptaron cuando en la esquina de Allende y Ocampo, en la ciudad de Teziutlán, lo pasaron a la parte trasera de un vehículo de color rojo, donde el periodista alcanzó el descuido de uno de sus captores para enviar un mensaje vía WatsApp que decía "me están levantando".
Es obvio que los captores de Ortega Bonilla, quien además es técnico en urgencias médicas, no pretendían hacerle más daño que asustarlo.
El reportero narra en su denuncia que cuando le vieron el celular se lo quitaron, lo amarraron de pies y manos y le colocaron una bolsa en la cabeza.
Circularon por carretera de 15 a 20 minutos, se metieron por un camino de terracería, llegaron a un lugar desconocido y se comunicaron vía radio con su presunto jefe, de "clave uno", éste les dijo que "sólo iba a ser un sustito"
Uno de los desconocidos le colocó la punta de un arma de fuego en la cabeza, sintió como era accionada y sólo escucho un click, luego lo volvieron a levantar, lo metieron al coche y lo llevaron hasta una barranca donde lo aventaron.
Tardó una hora para poderse desatar, caminó a la carretera y pidió auxilio para poder regresar a su casa.
El motivo del "sustito" es que el reportero comentaba en su espacio de noticias la inseguridad que se vive en Chignautla.
El caso del reportero es de los muchos que se guardan en los "archivos secretos" para evitar que la inseguridad, que también afecta a periodistas, aleje las "fastuosas inversiones" que se han anunciado en Puebla.
¿Miedo?
Nos vemos cuando nos veamos.