De acuerdo a un reporte informativo de CNN-México, del 11 de febrero del 2014, cuatro funcionarios del gobierno del estado de Puebla no habrían aprobado el "examen de confianza", pero tampoco lo reprobaron, los dejaron pasar como "recomendables", algo así como que "pasaron de panzazo" o que no les quedó de otra más que "darles un palomazo", por aquello de no quedar mal ante los poblanos, que hasta ese mes tendrían una mediana confianza en sus autoridades.
Entre los funcionarios que no aprobaron el examen de confianza, pero les sostuvieron sus empleos para no renunciarlos tan vergonzosamente, se encuentran ‎Víctor Antonio Carrancá Bourget, procurador general de Justicia, conocido actualmente como el que armó el teatrazo ese de "la explosión expansiva" que provocó la muerte de un menor de 13 años de edad en San Bernardino Chalchihuapan, que —al parecer de un servidor— debió ser quien armara la conferencia de prensa sobre los 43 estudiantes calcinados, le hubieran creído más; el segundo de los funcionarios aludido como el que no aprobó el examen de confianza es Gustavo Luis Huerta Yedra, en ese momento subprocurador de Procedimientos Regionales de Puebla y actual fiscal general regional.
Juan Zeferino Sánchez Zarza, en esa fecha subsecretario de Seguridad Pública y Juan Luis Galán Ruiz, que tomó el cargo de director de la Policía Ministerial del Estado, sin ser abogado, y quien de la noche a la mañana se hizo propietario de sendas residencias y departamentos, tanto en territorio poblano —zona de Angelópolis— como en el Distrito Federal. 
Estos cuatro funcionarios fueron los únicos que la Procuraduría General de la República (PGR) calificó como "recomendables", mientras que los otros 101 que fueron evaluados obtuvieron el resultado de "aprobados".
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La nota  
“(CNNMéxico) - Los altos mandos de seguridad pública de las 31 entidades del país aprobaron las evaluaciones de control de confianza aplicadas entre 2011 y junio de 2013, informó la Procuraduría General de la República (PGR) en respuesta a una solicitud de información.
”De los 105 servidores considerados como de alto mando, 101 obtuvieron el resultado aprobado, mientras que cuatro alcanzaron el resultado `recomendable´. Ninguno fue evaluado como `no recomendable´.
”Los servidores evaluados ocupan los cargos de procuradores generales de justicia, secretarios generales de gobierno, subprocuradores, así como directores generales de la policía ministerial, de la policía jurídica, de la policía investigadora y fiscales generales de estado.
”Las cuatro personas con el resultado “recomendable” fueron funcionarios de Puebla  son Víctor Antonio Carranca Bourguet, procurador general de justicia del estado; Gustavo Luis Huerta Yedra, en ese momento subprocurador de Procedimientos Regionales de Puebla y actual Fiscal General Regional.
”Juan Zeferino Sánchez Zarza, subsecretario de Seguridad Pública de Puebla y Juan Luis Galán Ruiz, director de la policía ministerial de Puebla.
”Entre los funcionarios que obtuvieron la calificación de “aprobado” están Miguel Ángel Contreras Nieto, procurador general del Estado de México; Arsenio Durán Becerra, procurador general de Querétaro; Felipe Amadeo Flores Espinosa, procurador de Veracruz.
”Manuel de Jesús López López, procurador de Oaxaca y Felipe de Jesús Muñoz Vázquez, procurador de Aguascalientes.
”Sin embargo, el IFAI aprobó que los expedientes de las evaluaciones de control de confianza queden reservados debido a que “su difusión implicaría revelar los reactivos o las preguntas aplicadas y, en consecuencia, se pudieran vulnerar los procesos de admisión o de permanencia del personal”, señaló en un comunicado difundido este martes”.
 
El sicario oculto
Desde el jueves de la semana pasada, la Procuraduría General de Justicia (PGJ) ya tiene detenido a uno de los sicarios que privaron de la vida a un matrimonio de comerciantes y al hijo de estos, a quienes en un paraje hincaron y ejecutaron de un disparo de arma de fuego en la nuca y no mataron a una niña de siete años que estaba dormida cuando ocurrieron los hechos.
Los cuerpos de los ejecutados quedaron a escasos metros de su camioneta Ford tipo Ranger, que quedó sobre camino a Santa Clara, en San Miguel Xoxtla, cerca de los límites con Tlaxcala. ‎‎
Los nombres de los ejecutados son: Rolando Gutiérrez Ramos, quien tenía 38 años de edad; su esposa, Julia Mendoza Juárez, de 37; y el hijo de ambos, ‎Gustavo Ángel Gutiérrez Mendoza, de 14. Todos presentaban un disparo de arma de fuego en la cabeza.
El homicida es oriundo de Huejotzingo, con antecedentes penales por robo de vehículo y robo con violencia.
Se sabe que fue contratado por familiares de los tres occisos y que esto fue por un conflicto por tierras, entonces ¿porque la PGJ no ha informado de la detención?
Nos vemos cuando nos veamos.