Uno de los elementos policiacos que detuvo y acusó mediante denuncia ante el Ministerio Público a activistas de Cholula hace unos años fue acusado por abuso de autoridad y tortura en una aprehensión, lo que derivó en una recomendación de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
Se trata de Félix José Lucas, ahora policía municipal de San Andrés Cholula, quien incluso fue uno de los elementos reconocidos en diciembre pasado por el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) por su valor, honor y heroísmo.
En 1993, fue acusado por dos empresarios poblanos de una detención ilegal, en la que no solamente los privó de la libertad, sino también lo acusaron de tortura, como consta en el documento de la CNDH en poder de Intolerancia Diario.
Este elemento sanandreseño fue uno de los cinco policías municipales que no sólo declaró en contra de los activistas de este municipio que están contra la construcción del Parque de las Siete Culturas, sino también los detuvo el 7 de octubre.
Los denunció junto con sus compañeros a los activistas sólo por escupir, amenazar, jalonear e insultar verbalmente a los policías municipales de San Andrés Cholula.
Este tipo de agresiones sólo se tipifican como una falta administrativa y no como delito, señalaron abogados consultados, sin embargo, los llamados presos políticos se mantienen en prisión desde hace casi tres meses sin derecho a fianza.
La recomendación
El uniformado, hace 10 años, en 1995, fungía como elemento de la entonces Policía Judicial de Puebla y fue sujeto a la recomendación 92/95 de la CNDH.
Según dicha recomendación contra el gobierno de Puebla, encabezado en ese entonces por Manuel Bartlett Díaz, por una detención arbitraria de dos personas sin existir orden de aprehensión, flagrancia o notoria urgencia.
Por lo tanto la CNDH recomendó a la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) ampliar la recomendación 32/94, por la conducta de la agente del Ministerio Público del Fuero Común, quien consintió la detención ilegal de los recurrentes de parte de los elementos policiacos entre ellos Félix José Lucas.
La aprehensión fue en 1993 contra de dos empresarios poblanos, quienes mantenían un litigio por la posesión de una negociación.
Estas personas acusaron al entonces policía judicial Félix José Lucas, no sólo de la detención ilegal, sino también de haberlos torturado, según consta en el documento de la CNDH.
El 27 de octubre de 1994, el organismo estatal emitió la recomendación 32/94, dirigida al Procurador General de Justicia del Estado de Puebla, en la que solicitó iniciar procedimiento administrativo de investigación a fin de determinar la responsabilidad en que incurrió la Policía Judicial de esa entidad.
El 28 de noviembre de 1994, los señores Guillermo Alatriste Morales y José Luis Solano Hernández interpusieron ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Puebla recurso de impugnación en contra de la recomendación 32/94.
Al respecto, cabe señalar que de las constancias con que contó la CNDH se infiere que si bien es cierto que aun cuando la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Puebla realizó las actuaciones necesarias que evidenciaron la violación a los derechos humanos fue insuficiente, toda vez que omitió entrar al análisis completo de la violación de garantías de los recurrentes.
Todo debido a que únicamente solicitó iniciar un procedimiento administrativo de investigación a efecto de determinar la responsabilidad en que incurrieron los elementos de la Policía Judicial que detuvieron a los agraviados.
Es importante señalar que la CNDH determinó en lo que respecta a los golpes y a la coacción física de que según los quejosos fueron objeto para declararse culpables al rendir sus declaraciones ante la agente del Ministerio Público, sólo existió el dicho de estos, puesto que no rindieron ninguna prueba ni aportaron dato alguno para justificar su afirmación.
Además, José Luis Solano Hernández, en su declaración ministerial, aseveró que no fue maltratado ni golpeado por la policía judicial.
Así las cosas con el policía condecorado y que su declaración mantiene en prisión a los activistas cholultecas.