Del rechazo abierto a la aceptación razonable, y de ahí hasta la dosis cargada de dudas y sospechas sobre la autenticidad de las palabras del interlocutor. 
Así han sido las reacciones generadas entres quienes pudieron ver o leer la entrevista que concedió a este reportero el lunes 15de junio, Fernando Manzanilla Prieto, el ex secretario general de Gobierno que fue coordinador de campaña de Rafael Moreno Valle y más tarde también responsable de conducir la comisión de Transición en 2010.
Un experimentado consultor político no se anduvo por las ramas y de plano preguntó si podía considerársele como el caballo negro de Rafael Moreno Valle en la muy próxima sucesión en 2016, desde una candidatura sin partido.
Los mensajes en esta semana no han cesado. A través de DM por Twitter, en Facebbok, WhatsApp o telefonazos, la constante es un conjunto de preguntas y conjeturas sobre la entrevista de quien también coordinó la campaña de quien hoy es presidente municipal, Antonio GaliFayad.    
El cuñado que decidió por la salida del gobierno cuando se le regateó la posibilidad de ser el abanderado a la presidencia municipal parece ser arquitecto de su propia leyenda a despecho del plomero del régimen, Míster Siniestro (Eukid Castañón, diputado local) que ganó espacios de poder en el círculo íntimo a costa del sacrificio del propio Manzanilla Prieto.
Admito que no podría saber si será candidato independiente, como en efecto se descartó en la entrevista publicada en esta misma columna: “Creo que es muy difícil construir una candidatura independiente en tan poco tiempo, no me veo como candidato en 2016 y tampoco tengo interés en serlo en 2018”.
Tampoco sé de cierto si como dice la voz anónima y amorfa de los especuladores de profesión, es una cortina de humo el distanciamiento de éste con su cuñado el gobernador de Puebla, ya visto en el país como un potencial precandidato a la Presidencia de México.
Sí pude advertir la frialdad de su voz cuando establecimos contacto afinar las condiciones de la entrevista—la primera que concede desde su autoexilio—, una semana antes de los comicios del domingo siete de junio a partir de los resultados que estos arrojarían y que hoy conocemos, en desdoro de la capacidad de operación de los morenovallistas.
“Yo ando en lo mío y Rafael tomó su propio camino”, me dijo a través del teléfono cuando hablamos de las condiciones en las que se desarrollaba la coyuntura política de Puebla y el país en general, previamente a la jornada electoral.
Frialdad que produce la distancia, el alejamiento o el destierro político. La interpretación es subjetiva.
Por encima de la especulación general del círculo rojo; del panista o priista; del independiente; desde la academia, o del periodismo hay que tener claro lo que se admite en la entrevista: las candidaturas independientes o ciudadanas es la ruta y el destino de la nueva forma de hacer política.
En política lo que parece es. Engaña con la verdad y eso habrá que leerse entre líneas, y será sólo para los iniciados revisar lo dicho por el entrevistado a quien no se le puede regatear mérito alguno.