Pareciera que la Confederación Nacional Campesina (CNC) en Puebla se ha convertido en un Caballo de Troya del Movimiento Regeneración Nacional (Morena). 

Nada más hay que dar una revisada al historial de sus actuales dirigentes. 

Y es que el cambio de bandera de Maritza Marín Marcelo de la siempre priista CNC a Morena, va mucho más a allá que un simple abandono de las huestes cenecistas, priistas y del candidato Alberto Jiménez Merino. 

Es una historia que desnuda la mala operación que ha tenido el equipo del candidato del PRI Alberto Jiménez Merino, a lo largo de la campaña. 

Pero también hay quienes piensan que podría revelar que realmente los priistas nada más están haciendo el trámite a sabiendas de la derrota. 

Parte de un acuerdo. 

Lo raro está en que la gente que se quedó en la CNC, ya había operado para el Movimiento Regeneración Nacional (Morena) de alguno u otro modo. 

Con esas credenciales, ahora lo harán para Jiménez Merino. 

Los cenecistas retornados ya habían trabajado con el ahora candidato a la gubernatura desde los varios cargos que ha tenido, como secretario de Desarrollo Rural estatal o delegado de la Comisión Nacional del Agua (Conagua). 

Por eso también se habla en los corrillos políticos que fueron requeridos por el propio Jiménez Merino, para su campaña. 

Lo raro es que casi todos tuvieron coqueteos o de plano trabajaron para Morena apenas hace unos meses. 

  • Los camaleones cenecistas 

Uno de estos ejemplos es la historia de Hugo Montalvo, quien ahora llega a la CNC como presidente del Comité Regional Campesino en Tehuacán. 

Esta persona fue líder o presidente del PRI de la región de Tehuacán. 

Pero se señala que después apoyó al ex gobernador Rafael Moreno Valle durante el sexenio. 

Y apenas en la pasada elección se transformó de nuevo, pero ahora para apoyar a Morena. 

Todo por pertenecer al grupo del expresidente de Tehuacán, Álvaro Alatriste, quien fue rechazado al no conseguir la candidatura a gobernador. 

Hugo Montalvo, fue enviado por "El Mostro" -como es conocido el ex edil-, para ser un operador de Morena en la elección del 2018. 

Otro caso es el de Félix Jiménez Bautista, actual secretario general de los Agrónomos Democráticos, organización que en la elección pasada dieron su apoyo a Morena. 

Su vínculo con el morenismo es su gran amigo, Víctor Suárez Carrera, actual subsecretario de Autosuficiencia Alimentaria del gobierno federal, con quien se le vio en la campaña de 2018. 

Víctor Suárez, fue el creador a nivel nacional de la asociación de Agrónomos y puso a su amigo Félix Jiménez a operar en el Estado de Puebla. 

Además el ahora funcionario federal, casualmente también estudió en la Universidad de Chapingo, donde Alberto Jiménez Merino, fue rector interino. 

En la lista de exmorenistas y ahora priistas de nuevo, está también Juan Mauro Balderas Múñoz, quien fue presidente general de CNC en Puebla, un periodo antes que Maritza Marín. 

Se dice que al estar calladito durante el morenovallismo sin hacer ninguna crítica, como premio le dieron a su hija la candidatura del PAN por la presidencia municipal de Tepeyahualco, la que finalmente perdió contra Movimiento Ciudadano. 

También fue candidato a diputado local por el PRI, cuando Moreno Valle fue abanderado del PAN a gobernador. 

Por lo tanto, se dice que hizo brazos cruzados en su campaña. 

Ahora, se menciona que regresó a la CNC porque Jiménez Merino con el ánimo de sumar lo llamó.  

Pero realmente, en los pasillos cenecistas se señala que es el poder tras el trono, ya que opera sin cartera oficial cenecista. 

Sobre todo porque el actual delegado cenecista en Puebla, Elías Pérez, proviene del Estado de Jalisco y no conoce la radiografía política poblana. 

Finalmente, Francisco Ramírez Gómez, quien fue candidato del PRI al municipio de Acatzingo, regresa a la CNC como secretario de Proyectos. 

Lo malo es que en 2018, buscó el cobijo con el actual Senador de Morena, Alejandro Armenta Mier. 

Y consiguió un buen hueso gracias al Senador, al ser mandado a Jalisco como encargado de la parte administrativa en Jalisco en la Sectetaría de Agricultura y Desarrollo Social (Sader). 

Tenía la promesa que sería el delegado. 

Pero para su mala suerte no se pudo cumplir el acuerdo, debido a la desaparición de las delegaciones en el gobierno federal de Andrés Manuel López Obrador.  

Ahora por las circunstancias, casualmente regresa a Puebla a apoyar a Jiménez Merino. 

Ver para creer. 

  • La desbandada 

Lo cierto es que Maritza Marín se fue a apoyar a Luis Miguel Barbosa, no sola, sino con todo un grupo de ex lideres de la Confederación Nacional Campesina (CNC). 

Nada más jalaron con ella 24 de 26 delegados. 

Por eso la CNC se desmanteló con la desbandada, lo que aprovecharon los personajes arriba señalados. 

Y todos los que se fueron se llevan una estructura que garantizará votos para el candidato del Morena al gobierno de Puebla. 

A hora solo queda esperar a ver de qué cuero salen más correas o confirmar que todos son de un mismo equipo. 

Tiempo al tiempo.