La falta de tacto y oficio del presidente municipal de Tehuacán, Felipe Patjane le va a generar periodos turbulentos en el contexto de un acontecimiento coyuntural, como la visita Puebla de Andrés Manuel López Obrador, el presidente de la austeridad republicana.
Lo será por la divulgación a través de WhatsApp de una fotografía que relata la existencia de la renta de un helicóptero para pedir en matrimonio a Paulina Vargas Sobrado, quien además es funcionaria en la comuna y que ya ha generado críticas y molestia general.
Según versiones periodísticas diversas, el presidente municipal cuyos orígenes políticos están en el Partido Acción Nacional, comenzó una relación de noviazgo con la funcionaria apenas comenzada la administración municipal, una decisión personal y de la vida privada que trascendió por tratarse de dos servidores públicos.
La relación ha irritado aún más a sectores influyentes de esa ciudad debido al incumplimiento de compromisos clave para una convivencia armónica en esa sociedad, como la seguridad pública en un contexto generalizado que asegura, ha rebasado a la autoridad.
La percepción de inseguridad en ese municipio tiene como bases sólidas un conjunto de datos duros que se acumulan con el paso de los días: sólo por citar uno de ellos, el lunes 10 de junio una camioneta tripulada por un grupo armando ejecutó a dos personas de nombre, Miguel González Rivera de 37 años y Rodrigo Ramos López, a una calle de donde se ubica el Palacio Municipal.
La revelación del contexto en esa demarcación municipal no es nueva, pero cobra una dimensión distinta con la primera visita presidencial de López Obrador luego de la elección extraordinaria de la que resultó ganador su candidato, Luis Miguel Barbosa.
López Obrador y el gobernador electo han insistido en la necesidad de cambiar las formas en el ejercicio de poder ante el hartazgo social por los métodos abusivos con que se han conducido otros gobiernos, cobijados por partidos políticos adversarios naturales de la Cuarta Transformación.
Patjane y su forma plutocrática de ejercer el poder en la presidencia municipal de Tehuacán encaja como anillo al dedo en la línea discursiva del mandatario del país y de quien protestará el cargo el 1 de agosto, a quien por cierto el propio edil llamó su ‘padre político’.
